Oriundo de Defensor Sporting, jugó durante dos décadas en el fusionado y fue campeón en juveniles en el año 1979. Un año más tarde se consagró campeón del Federal en primera división con Defensor, dirigido por Atilio Carneiro. Su segundo campeonato llegó en 1985, también en el equipo de Parque Rodó. Fue en 1991 que Gerardo jugó en otro equipo -Bohemios-, para luego volver a Defensor nuevamente y años más tarde retirarse en el club de sus amores.
En el 2000 y luego de retirarse, Jauri comenzó su ciclo de entrenador, en esa ocasión como asistente técnico de Daniel Ciechanovecci en Defensor Sporting. Fue en 2002 que el ingeniero de profesión se haría cargo del plantel principal de Defensor Sporting como entrenador. Desde ahí el fusionado consiguió dos campeonatos de Liga Uruguaya, un vice campeonato y llegó a tres semifinales.
En la selección Jauri tuvo su participación como jugador, integrándose al plantel del Mundial 1982 en Colombia además de los Sudamericanos en Medellín en 1985 y Asunción en 1987. Luego tuvo su paso en la dirección técnica de Uruguay desde 2008 hasta 2012.
Ahora, volvió a la selección uruguaya elegido por el director de selecciones Álvaro Tito, donde se encuentra trabajando con Nicolás Mazzarino, Pablo Morales y Marcelo Bessi como preparador físico, además de un amplio equipo de coordinadores y ayudantes que nutren al cuerpo técnico.
A dos meses de la presentación oficial por parte de la Federación Uruguaya de Básquetbol y con el Torneo Preolímpico a la vuelta de la esquina, el técnico charló con Sala de Redacción.
–¿Cómo fue la preparación de cara al Preolímpico que se disputará en Argentina en los próximos días?
-Tuvimos dos microciclos de cuatro días y un descanso con turnos simples de tres horas, estamos así desde el 28 de julio, sin amistosos por ahora. El miércoles 9 partimos hacia Santiago del Estero y al día siguiente tenemos el primer amistoso ante la selección mayor de Argentina. El 11 tenemos el segundo amistoso ante la U22 de Argentina y debutamos el 14.
–¿Qué se siente regresar a la selección luego de diez años?
-Es un orgullo que entiendan que soy la persona adecuada, que puedo aportar en este momento. Ese orgullo viene acompañado de humildad, saber que no hay recetas mágicas para emprender un camino del mejoramiento del básquetbol. Achicar las brechas internacionales no es solo la competencia en sí, sino la competencia local, la formación de jóvenes. Hay cosas en donde no podemos interactuar, por nuestro biotipo de jugadores, por nuestra demografía. Creo que tenemos otras áreas en donde podemos interactuar, con un pensamiento más allá de los campeonatos cercanos, pensando en las generaciones venideras: cómo prepararlas, con una visión a mediano y largo plazo.
–Respecto al cambio generacional que inexorablemente tendrá que venir en la selección ¿Has hablado con jugadores como Santiago Vescovi? Es un jugador joven, con un presente alentador…
-He hablado con él, si. Incluso antes de hablar con él lo escuche en una entrevista diciendo que en su universidad en Estados Unidos dedicaba cinco horas diarias al básquetbol. Fijate la diferencia: un gurí de formativas acá dedica una hora y media cada tres o cuatro días. Tenemos que pensar en poder sacar gurises hacia afuera, ver su perfil, hacia dónde van. Me gustaría poder incidir en esas cosas.
-Es difícil suplir a un jugador como Esteban Batista?
-El ciclo de Esteban fue una solución tremenda en posición, pero bueno, no somos un país en donde aparezcan jugadores de ese calibre y de ese porte. Nos tenemos que adecuar; suplir la falta de altura y nuestros kilos con intensidad, agresividad, ritmo… Y que no se nos escapen, tanto a nivel nacional como aquellos jugadores radicados en el exterior con nacionalidad uruguaya. Hay que hacer ese rastreo a nivel mundial.
–Con respecto a esto que decís ¿tienen scouting para llevar adelante estos procesos de investigación?
-Si. Se que se ha venido trabajando en ese aspecto, la Federación Uruguaya de Básquetbol ha avanzado mucho. Con la asunción de Álvaro Tito como director deportivo se creó un organigrama que está funcionando, en donde hay un departamento específico tecnológico de scouting y seguimiento. Esto está a cargo de Nicolás Scarabino y él nos va a dar un soporte general al cuerpo técnico en cuanto al scouting de rivales, pero también se va a encargar de explorar en el mundo la posibilidad de tener a jóvenes jugando al básquetbol con nacionalidad uruguaya. También se creó un departamento específico de técnica individual a cargo de Gonzalo Brea que está muy bueno. La exigencia de hoy en día te pide que a los jugadores los apoyen desde todos lados, la técnica individual es muy importante y está bueno que se trabaje en ese tema específicamente.
–El contrato de la selección es part time ¿Tenés pensado tomar otro equipo de liga uruguaya por ejemplo?
-Lo más responsable entendí que era quedarme con una sola actividad. El vínculo me abría la posibilidad de tener otra participación de equipo de liga porque las ventanas son puntuales y específicas. Me costó mucho tomar la decisión de quedarme exclusivamente con la selección porque también había otros desafíos en equipos importantes, fue muy pensada. La selección es un proyecto nuevo, no desconozco que se han hecho cosas pero no deja de ser un proceso nuevo. Agarrar otro equipo también sería un proceso nuevo y eso me abarcaría en la parte mental tener dos chip diferentes, son cosas diferentes y prefiero por ahora quedarme solo con la selección. Esto no quiere decir que en un futuro pueda rever la posición, porque el vínculo contractual así me lo permite.
–¿Has hablado con Rubén Magnano, ex entrenador de la selección?
-Si, correspondía éticamente charlar con él antes de tomar la decisión de desembarcar en la selección.
–¿Qué chances tiene Jayson Granger de participar en la selección ahora que jugará en Peñarol?
-Tener los jugadores más cerca es mejor, teniendo en cuenta los compromisos que ellos tienen. Cuando a nivel profesional están afuera eso significa cosas… veremos cómo se termina de desarrollar. Sin duda es un jugador importante que le da un salto de calidad al torneo. No he hablado con él aun. Con el único jugador que he tenido contacto porque entendía que era con el primero que debía hacerlo fue con Bruno Fitipaldo.
–Volviendo al Preolímpico ¿Qué expectativas tenés con respecto al torneo?
-Iremos a competir con nuestras armas, sabiendo que no somos más que nadie y que estamos comenzando un proceso de conocimiento mutuo entre cuerpo técnico y jugadores. Intentaremos desarrollar las ideas de juego que creemos más convenientes, siendo intensos, imponiendo ritmo defensivo-ofensivo. Estas ideas siempre necesitan trabajos prolongados en el tiempo, esperemos ir encontrando esas ideas en la cancha y ganar la mayor cantidad de partidos. También teniendo una mirada sobre cómo jugar de aquí en más y con el gran compromiso de todos los integrantes del plantel.
Fuente: FUBBUY