La elección fue un águila. Foto: tatuajes123.com

No indica sexo, edad o raza, llama la atención y cada vez más personas lo llevan consigo. Viene desde muchos siglos atrás y posee distintos significados según la cultura en que se realiza. Algunos lo toman como un arte, otros como una filosofía, otros lo hacen por modismo y estética, y también se lo vincula a la criminalidad. La palabra tattoo significa marcar o golpear dos veces. Los tatuajes comenzaron en tiempos neolíticos y hoy se instalan en el mundo como algo normal pero que sigue impresionando y es rechazado por muchos que lo ven como algo desagradable o sencillamente como una agresión a la piel y al cuerpo, sobre todo desde el punto de vista religioso.
Rodrigo es un tatuador destacado en su medio y se dedica a este trabajo hace cuatro años. Para él los tatuajes dependen del contexto histórico, la edad de quien se lo hace y de su vivencia. En diálogo con Sala de Redacción, Rodrigo sostuvo que “hablamos de contexto histórico destacando la evolución del tatuaje en las diferentes sociedades. La juventud parece adaptarse mejor a este estilo de arte, que cobró fuerza en las últimas décadas. El hecho de que los adultos mayores se criaran sin este tipo de arte, genera una ausencia de esos clientes, y hace que la mayoría rechace ver el tatuaje en un joven”.
Lleva tiempo definirlo. Buscar el modelo y, sobre todo, animarse y encontrar a alguien de confianza, debido a que “el 50% de las personas quieren taparse algo que ya se hicieron y les quedó mal”. Rodrigo afirma que los tatuajes generan adicción, aunque siempre va a depender del caso y de la elección del cliente. “Si el primer tatuaje tiene un gran significado, seguramente no sea el último que se haga. La mayoría de las personas suelen perder el miedo después de realizarse el primero, y se sienten parte del selecto grupo de personas que cuentan con dicho arte, lo que los llevarán a realizarse otro”. Los clientes “generalmente buscan hacerse cosas relacionadas a vínculos familiares, dedicatorias, recuerdos y frases”, afirmó. “Más allá del significado que un tatuaje pueda tener, también es de suma importancia la estética que refleja. Hay que tener en cuenta que el tatuaje es la creación de un artista que, gracias a su talento, experiencia y creatividad, logra plasmar en el cuerpo de un ser su obra de arte. Es por esto que los tatuajes deben ser vistos como un arte y no como un tabú”. En lo que refiere a los cuidados y a la higiene, contó que “hay un curso de bioseguridad que es realizado por el Ministerio de Salud Pública, en el Hospital de Clínicas, que enseña a los tatuadores todo lo relacionado a la higiene y a la esterilización. Consultado sobre su experiencia personal, dijo que “en el 95% de los casos no he tenido problemas con los pigmentos, ya que son hipoalergénicos, o sea, no causan alergias. Rara vez a algunas personas les causa una leve infección en determinados colores, pero muy leve. Se le recomienda una crema, antibióticos y se soluciona el problema”.
“Mi primer tatuaje lo hice por estética, pero sin dejar de lado el significado”, cuenta Gervasio. “La cantidad que tengo no es exacta, porque tengo muchos en el brazo que están todos entrelazados, y voy camino a hacerme una manga”, o sea, cubrir desde el hombro hasta la muñeca. “Para mí tienen muchos significados, tengo tatuajes estéticos, religiosos, políticos, cosas personales y nombres de mis familiares más cercanos”. Consultado sobre si se siente observado, respondió que “a veces me miran, sobre todo en verano, a mi igual no me molesta, aunque trato de no mostrarlos en lo posible porque son muy personales, son para mí”.
En relación al paso del tiempo, cree que la mayoría de las personas no es totalmente consciente cuando se tatúa de que es algo para toda la vida. Más allá de que haya técnicas para eliminarlos, el procedimiento es complejo. “La mayoría lo hace cuando es joven, y seguramente algo cambie en la manera de pensar, de sentir. En mi caso no creo arrepentirme porque me va a recordar una etapa de mi vida, de cómo pensaba en ese entonces, una nostalgia linda (risas)”. Él opina que, en el mundo globalizado, los tatuajes se han desmitificando gracias a que los usan futbolistas, actores y famosos en general. “Hoy las tecnologías y las tintas son mejores, y si el primer tatuaje te queda bien, te motivás a hacerte otro y que ese va a ser mejor aún”, concluyó.
Desde el punto de vista sanitario, el doctor Alejandro Paggiola sostuvo que si la zona está bien desinfectada, no hay microbios y se utilizan tintas y agujas esterilizadas no debería haber problemas. Por su parte, el doctor Cristian García sostuvo una opinión similar agregando que hay zonas en las que no conviene tatuarse debido a una posible cirugía. “Si a un paciente se le debe realizar un bloqueo epidural, por poner un ejemplo, en la zona de la columna lumbar, no se lo podemos hacer si tiene un tatuaje”, finalizó.

Federico Correa
 
 
 

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