“Hoy como ayer, la clase obrera no fallará”, es la consigna que la central sindical eligió para este 1º de mayo, que invita a conmemorar “la heroica huelga sindical” que en 1973 convocó la entonces Convención Nacional de Trabajadores (CNT) para resistir el golpe de Estado. Este año, el Día Internacional de los y las Trabajadoras estará atravesado, además, por la conmemoración de los 40 años del histórico acto del 1º de mayo de 1983, en el contexto de la derrota de la dictadura cívico-militar.
Florencia Leymonié, dirigente de Sindicato Único de Telecomunicaciones (SUTEL) e integrante del Secretariado del PIT-CNT resaltó, en dialogó con Sala de Redacción, el valor histórico de aquellos acontecimientos, imprescindibles para los preparativos de este nuevo día de lucha. Como parte de los elementos fundamentales que marcan la ruta de las reivindicaciones de este 1º de mayo, se detuvo sobre la pérdida salarial de trabajadores y trabajadoras, que “antes se justificaban por las dificultades de atravesar una pandemia, y hoy por la retracción económica”.
En esta línea, la dirigente sindical fue crítica con la coalición de gobierno, y consideró que el contexto actual del país está marcado por una profundización de las desigualdades en todas sus expresiones. Como ejemplo, se refirió a la aprobación del proyecto de ley de corresponsabilidad en la crianza (o tenencia compartida), como una instancia que aunó las voces de trabajadoras, trabajadores, y “más de treinta organizaciones y colectivos sociales que se presentaron en comisión para expresar su rechazo”.
De espaldas al pueblo
Leymonié subrayó que la discusión sobre la reforma jubilatoria, cuyo proyecto fue aprobado este martes en el plenario de Diputados, es un “ajuste fiscal encubierto disfrazado de reforma de la seguridad social desde todo punto de vista”. También opinó que los cambios propuestos “profundizan la deuda histórica con las mujeres”, puesto que con la nueva legislación, según datos de la Coordinadora de Feminismos, el 46% de las mujeres no tendrá los 30 años de trabajo requeridos cuando lleguen a la edad para jubilarse.
A su vez, denunció que la reforma educativa se lleve adelante “con indiferencia y sordera a cualquier planteo” a pesar de las múltiples manifestaciones del movimiento estudiantil, las organizaciones sindicales, y el movimiento organizado de padres y madres de estudiantes. Por otra parte, señaló que a este escenario se le suman las decisiones políticas que debilitan y desmantelan las empresas públicas, con el fin de justificar la privatización y la mercantilización de la vida.
Paralelamente, reparó en el valor fundamental de la organización popular a través del Congreso del Pueblo, cuya nueva edición comenzó a gestarse a partir de la recolección de firmas para conseguir el referéndum contra los 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración. En su opinión, el Congreso del Pueblo, organizado por el PIT-CNT y la Intersocial, será una oportunidad para “trazar líneas, orientaciones, objetivos”, en pos de “construir una sociedad más justa que verdaderamente erradique desigualdades de género, desigualdades económicas, desigualdades étnicas, desigualdades en todo su espectro”.
Finalmente, la militante de SUTEL afirmó que desde el PIT-CNT “no naturalizamos la pobreza, no naturalizamos la desigualdad social”, y agregó que como parte de la clase obrera organizada, se busca hacer foco en organizar la esperanza “para poder no solamente decidir, sino luchar por todos esos elementos”.
En Montevideo será una jornada particular: a partir de las 9:00 se movilizarán caravanas desde distintos puntos de la capital, Canelones y San José, para arribar a las 10:30 a la Plaza 1° de Mayo y marchar a pie hacia el lugar del escenario, que se instalará en Avenida del Libertador y Cuareim. En paralelo, se realizarán actividades en otros puntos del país.
