Con la antesala de la semana anterior de una interpelación de más de 24 horas al ministro del interior, Luis Alberto Heber, este martes 4 de julio la Cámara de Representantes sesionó de manera extraordinaria para discutir en torno a una moción de censura impulsada por el Frente Amplio (FA) contra Heber por los resultados en su gestión de la seguridad pública.
Sebastián Valdomir, diputado del FA, quien había sido el miembro interpelante en la sesión anterior, argumentó que la oposición planteó la moción de censura luego de pedir la renuncia del ministro “en varias oportunidades y por diferentes temas” sin resultados positivos. Afirmó que en la interpelación sólo se reafirmó la visión existente respecto a la gestión del Ministerio del Interior. “No se puede ser crítico y después sostener con los votos de las cámaras una gestión que a todas luces es insuficiente e insatisfactoria para devolver la tranquilidad a los uruguayos”, sentenció.
Los diputados de Cabildo Abierto (CA), quienes durante la interpelación habían promovido una declaración crítica con la gestión de Heber, rechazaron la censura al considerar que la situación no era lo suficientemente grave como para desembocar en la renuncia o en la destitución del jerarca. “Cabildo Abierto no cree que la solución sea quitar al ministro, sino rectificar el rumbo de cómo llevamos las políticas a territorio y a eso fue a lo que apostamos y seguimos apostando” dijo el diputado Martín Sodano, y afirmó que “se quiere censurar a un ministro porque en tres años y medio no se hizo lo que en más de 15 no pudieron”, en alusión a los gobiernos del FA.
Por su parte, los dirigentes del Partido Nacional (PN), apoyaron el trabajo de Heber y argumentaron estar en “mejores situaciones” en materia de seguridad que en gobiernos anteriores. Aunque el diputado Juan Martín Rodríguez advirtió que sería un “mal ejemplo” conformarse con “resultados parciales”, de todos modos, dijo que el PN no votaría la moción de censura; opinó que Heber está “cumpliendo con las exigencias que tiene cualquier gobernador” que se ha parado ante “desafíos” y los ha “encarado como alguien que no va a dejar un segundo de cumplir con su responsabilidad”. A su vez, reconoció la existencia de “matices” y “diferencias” dentro de la coalición, y consideró que las mismas generan “diversidad” y permiten el respeto entre opiniones.
Conrado Rodríguez, representante del Partido Colorado (PC), trajo a colación la tasa de homicidios en 2018 y alegó que en aquel momento no se aplicó “ningún tipo de política de prevención”; en la actualidad, a su entender, “se han obtenido mejores números”. Opinó que la oposición no tuvo “coherencia” con el posicionamiento y la desaprobación de la gestión de Heber, y arremetió que “para ser coherentes se tendría que haber censurado a [el ex ministro de Interior, Eduardo] Bonomi”.
La moción de censura fue votada por 42 diputados, sólo los del FA. Tras votar en contra, el diputado colorado Gustavo Zubía justificó su rechazo y señaló tener una postura “altamente crítica” de la gestión del jerarca y en torno a las políticas adoptadas para la seguridad; mencionó que se ha cambiado de “libreto” y que era “peligroso” hacerlo “a mitad del río”. Respecto a las nuevas políticas empleadas, argumentó que las anteriores eran “más claras” y “más directas”.
Eduardo Lust, quien fue electo por CA pero abandonó ese partido, expresó que la situación de violencia que atraviesa la sociedad uruguaya es “producto de 15 o 20 años de descuido en la educación de la gente, de valores sociales” y opinó que el cambio “no lo va a lograr el ministro Heber, por más que lo cambien, ni el que viene” y agregó que los ministros “hacen lo que pueden”.
La diputada nacionalista Alexandra Inzaurralde argumentó que no apoyó un nombre, “nos oponemos a que se cuestione una gestión por quién es quien la lleva adelante; estamos apoyando gestión, acciones y resultados” finalizó.
Desde el Partido Independiente, Iván Posada mostró su apoyo a las políticas de gobierno en torno a la seguridad: evaluó que los resultados que se lograron “deben ser destacados” y reflexionó que la medida de censura también significaría “una censura para la actuación policial”. Además, solicitó una mayor presencia policial en las calles.
Desde el FA, Gonzalo Civila, coordinador de bancada frenteamplista, remarcó que durante la interpelación le preocupó la mención del estado de “guerra” que desembocó en “mencionar muertes como efectos colaterales de una guerra que se está librando de la cual la sociedad conoce muy poco”. Señaló, a su vez, el “escudo” en la Policía Nacional sobre la cual se hace eco Heber ante situaciones que comprometen directamente a su gestión.