El fiscal Alberto Nisman dando una conferencia de prensa en mayo de 2009. AFP PHOTO/JUAN MABROMATA

La junta médica convocada por la fiscal Viviana Fein finalizó el análisis de la documentación relacionada con el caso de la muerte del fiscal Alberto Nisman, y en los próximos días se espera surjan nuevos insumos para definir de qué manera falleció el fiscal.
El “caso Nisman” revolucionó política y socialmente a toda Argentina, luego que el cuerpo del fiscal fuera encontrado sin vida en su apartamento, en una torre de lujo de Puerto Madero, cuatro días después de la denuncia contra la presidenta Cristina Fernández por encubrimiento a un grupo de iraníes, acusados de ser los autores del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) –causa que investigaba Nisman-. La acusación finalmente fue desechada.
El kirchnerismo, por su parte, relacionó al fiscal con la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y con los servicios de inteligencia de Israel. Edgardo De Petri, diputado ultrakirchnerista aseguró, en una entrevista a un canal oficialista iraní, Hispan TV, que Nisman era “un hombre cercano a los servicios de inteligencia de Estados Unidos e Israel”.
Además, según arrojó una investigación de la revista argentina Anfibia, jueces federales y ex compañeros de Nisman contaron que cada vez que llegaba a Estados Unidos, al fiscal lo esperaban lujosas camionetas manejadas por gente de la CIA, y que la tumba de Nisman se encontraba muy próxima al Monumento de recordación de los caídos por la Defensa del Estado de Israel, y muy alejada a la de las victimas de la AMIA. Al día de hoy, la denuncia de Nisman fue rechazada, y estas versiones sobre el supuesto relacionamiento del fiscal con la CIA no fueron comprobadas.
En estos últimos días de investigación, el Cuerpo Médico Forense (CMF) señaló que los peritos terminaron de analizar los videos, fotografías y documentos médicos de la autopsia del fiscal, y junto a la fiscal Fein, debatirán las circunstancias del fallecimiento de Nisman. Esta junta médica fue convocada por Fein para intentar llegar a una única conclusión sobre la muerte del fiscal ante discrepancias entre los peritos oficiales y los de la querella, que insisten en que se trata de un asesinato.
Luego de la autopsia, los peritos del CMF establecieron que el fallecimiento fue en la mañana del domingo 18 de enero y que se trató de un suicidio, debido a que no había ningún rastro de terceras personas en el lugar, y que la mano de Nisman sufrió un espasmo cadavérico. Por otra parte, Sandra Arroyo Salgado, ex mujer de Nisman, junto a Sara Garfuken, madre del fiscal, son querellantes en esta causa y aseguraron que la muerte se dio el sábado 17 de enero en la noche, y que fue asesinado, ya que no se encontraron elementos suficientes para pensar que fue un suicidio.
Los aspectos clave
El 14 de enero, Nisman realizó una denuncia ante la Justicia contra la presidenta Cristina Fernández, el canciller Héctor Timerman, el diputado nacional por el Frente Para La Victoria Andrés Larroque y contra el personal de la Secretaría de Inteligencia de la Presidencia de la Nación. Los acusaba de participar en una presunta negociación para encubrir a ciudadanos iraníes acusados del atentado contra la AMIA de Buenos Aires en 1994, donde murieron 85 personas. Para Nisman, el gobierno había negociado con Teherán la impunidad de los sospechosos para poder retomar nuevamente las relaciones comerciales e intercambiar petróleo por granos.
Cuatro días más tarde, Nisman fue hallado muerto en el baño de su apartamento de Puerto Madero, con un disparo en la cabeza, a muy pocas horas de la convocatoria a declarar ante el Congreso Nacional. Junto a su cadáver se encontraba un revólver calibre 22. Llegaron al lugar del incidente el Secretario de Seguridad, Sergio Berni, el jefe de Policía Federal, Román Di Santo y la fiscal Viviana Fein.
El 26 de enero, la última persona que vio con vida al fiscal, Diego Lagomarsino, técnico que arreglaba las computadoras en la Fiscalía, fue imputado por prestarle a Nisman el revólver del que salió la bala que originó su muerte. Lagomarsino declaró ante la prensa que le había prestado el arma porque Nisman tenía temor de que le sucediera algo a sus hijas.
Un mes después del fallecimiento, se realizó la marcha del silencio, en la que acudieron cientos de personas, incluyendo la ex mujer y familiares. La presidenta de Argentina, Cristina Fernández calificó a la marcha del silencio, en las redes sociales, como “bautismo de fuego del partido judicial”, aludiendo a los grupos de intereses asociados con ciertos magistrados para realizar oposición política.
El 14 de abril la madre de Nisman declaró ante la justicia que descubrió que en su casa tenía guardado un revólver del fiscal junto a otros objetos personales de su hijo. La fiscal Fein pidió que el arma fuera incautada.
Por último, el 20 de abril se desechó definitivamente la denuncia de Nisman contra Cristina Fernández, debido a que el fiscal ante la Cámara de Casación, Javier De Luca, señaló que los hechos que aparecieron en la denuncia no pueden configurar de ninguna manera un delito.
Andrés Passadore

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