Veredas pintadas en Bacigalupi y Hocquart. Foto: Guillermo Rodríguez

Bacigalupi y Hocquart fueron las calles elegidas para la quinta pintada de veredas. A pocas cuadras del Palacio Legislativo, el barrio de Aguada tomaba color. Aunque las nubes parecían anunciar lluvia, el sol asomó y los colores en las veredas brillaron intensamente.
Entre niños, animadores, payasos y acróbatas, el frente del liceo Miranda se volvía variopinto. El diseño de la pintada era sencillo; desde el más habilidoso al menos aficionado a la pintura podía ayudar en la causa.
La jornada de varias horas tenía más fines que embellecer la ciudad (que ya no es  poca cosa). Juan Manuel necesitaba la ayuda de todos para poder operarse una vez más. Manu, como le dicen los amigos, nació con una patología congénita -espina bífida- y con una malformación llamada Arnol Chiari. Durante toda la jornada se podía colaborar en las alcancías para que Manu lograra viajar a Argentina y pudiera ser intervenido quirúrgicamente. Era un objetivo paralelo al de dar color a veredas grises.
Sala de Redacción entrevistó a Nicolás Hudson, uno de los organizadores del movimiento “Pintando las veredas de tu ciudad”, quien contó cómo empezó esta movida.
Nicolás, un joven de apenas veinte años, fue quien comenzó con el movimiento en octubre de 2013 cuando pintó la vereda frente a
su casa. Tiempo después decidió publicarlo en su cuenta de Facebook. Fue así que luego de recibir buenas críticas de los vecinos de Palermo, su barrio, hizo la primera pintada de veredas en la intersección de las calles Santiago de Chile y Maldonado. Amigos, familiares y vecinos de Nicolás pintaron toda la cuadra. El hecho no se conoció únicamente dentro de los límites de Palermo: diferentes medios de comunicación no tardaron en difundir la iniciativa.

Veredas pintadas en Bacigalupi y Hocquart. Foto: Guillermo Rodríguez

En febrero del presente año Nicolás se planteó hacer un proyecto organizado, con objetivos específicos, que se llamó “Pintando las veredas de tu cuidad”. La primera pintada fue en abril, pero el objetivo, en  palabras del artífice del proyecto, es “pintar todo Montevideo, o sea, que cada barrio tenga su cuadra pintada.” “Lo que quiero es que sean cuadras donde haya alguna institución, no solamente casas y comercios”. Es por este motivo que las convocatorias se hacen siempre en conjunto con los diferentes institutos comunitarios.
“Ahora ha crecido y ya la jornada es como un festival cultural porque vienen artistas a intervenir, bandas a tocar, vienen a hacer malabares, también clowns”. En esta quinta edición, cinco bandas se hicieron presentes. Primero le tocó el turno a Toto Yulelé, luego a Bardo Banda y con intervalos de por medio, la banda 8 Monos, La Imbailable Orquesta y Postal22 también aportaron al clima de fiesta con su música.
Sala de Redacción le consultó acerca de la autorización para pintar. Nicolás comentó que “cada propietario es quien debe dar el permiso; igualmente el municipio B -en este caso- se hizo presente en la jornada y apoyó la idea. Cortó la calle, puso el gazebo, afiches y volantes”. También mencionó que gracias a Pinturas Inca, este proyecto pudo hacerse realidad, ya que les donaron todas las pinturas necesarias.
Expresó que junto a él, son trece las personas con las que coordina las actividades y que se reúnen para plantearse los objetivos y la forma en que darán difusión al proyecto. Algunos se encargan de lo audiovisual y otros del seguimiento de la cuenta de facebook del movimiento.
En cuanto a los planes a futuro, contó que “hasta diciembre está planificada una pintada por mes dentro del municipio B. A partir del año que viene se pintarán otros barrios”.
El referente del movimiento notó que era tanta la gente que se acercaba -por mera curiosidad o con conocimiento de la causa- que pensó en agregarle más ingredientes a esos domingos de pintadas. “Pasaba tanta gente por las pintadas y era un ambiente tan sano y tan lindo, que había que aprovecharlo y sacarle más jugo. Así fue que agregamos artistas plásticos, bandas y campañas solidarias. En la pasada fue la ayuda para ‘Arriba Rock’ que era una movida para un chiquilín que tuvo un accidente y se tenía que operar. En esta oportunidad fue para Juan Manuel, un compañero mió del liceo. Pintada a pintada va a haber una causa diferente”.
“Pintando” es un proyecto que invita a público de todas las edades a disfrutar de un domingo diferente, darle color a nuestra ciudad y colaborar en una causa noble que, lejos de enarbolar una bandera de color partidario, levanta una multicolor y crea así un clima de integración y disfrute para todos. Nicolás, con sus veinte años, y todos los voluntarios que mes a mes se acercan a pintar, logran darle un respiro al gris montevideano.
Sandra Dominitz

FacebookTwitter