Foto: AFP / MIGUEL ROJO

En los últimos años, Montevideo se ha visto saturada de vehículos en circulación, sobre todo de automóviles, potenciando la posibilidad de incurrir en accidentes de tránsito. Según la Asociación Nacional de Consumidores por la Seguridad Vial (ANCOSEV), un auto puede poseer ciertos elementos reglamentados pero tener una estructura débil y deformable, y por tanto no proteger a los pasajeros. En ese marco hay dos normativas que parecen excluirse una a la otra. Por un lado la Ley Nacional de Tránsito demanda que un auto tenga determinados dispositivos de seguridad tales como airbags, cinturones y apoya cabeza. Por el otro, las normas de desempeño internacionales basadas en el Reglamento Vehicular UN94 y 95 de las Naciones Unidas establecen requisitos técnicos a base de ensayos de impacto frontal y lateral, independientes a los fabricantes, que prueban la estructura del vehículo.
Rodrigo Caudullo, ingeniero y asesor técnico de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (UNACEV), explicó a Sala de Redacción que los autos comercializados en el país pueden faltar a las normas de desempeño, pero si cumplen con lo dispuesto en la ley de tránsito 19.061 y en los decretos del Mercosur, entonces no violan la ley. Sin embargo, a mediados del año pasado según la Asociación de Concesionarios y Marcas de Automotoras (Ascoma), había 3.000 unidades que no cumplían con la ley y estaban a la venta.
HECHA LA LEY, HECHA LA TRAMPA. Durante el año pasado y de acuerdo a la UNASEV, hubo un total de 23.422 siniestros con 538 muertos; solo en la capital se registraron 8.508 accidentes y 166 con desenlace fatal, según la Intendencia de Montevideo. Estas cifras podrían ser consecuentes con el aumento sostenido que ha tenido el parque automotor en el territorio nacional.
La ley 19.061 aprobada en enero de 2013 obliga a que todos los autos cero quilómetro que se comercialicen en Uruguay tengan frenos ABS, la aplicación del SRI (Sistema de Retención Infantil), airbags frontales en las plazas delanteras como mínimo, apoya cabezas en todos sus asientos, maletín de primeros auxilios y cinturones de seguridad. Sin embargo, recién empezó a regir en julio del año pasado. El 3 de abril de 2014 el gobierno decretó la aprobación de la reglamentación recogida en esta ley y en el Reglamento técnico del Mercosur de similar contenido. En este decreto se previó un plazo de entre 6 y 18 meses más, además de los transcurridos luego de promulgada la ley, para que se comiencen a realizar los controles y fiscalizaciones correspondientes.
A un año del decreto, aún no hay rigor en garantizar autos seguros. Las marcas contaban y aún cuentan con un plazo para seguir vendiendo y agotar su stock. En relación a este período “ventana”, el secretario general ejecutivo de la UNASEV, Pablo Inthamoussu, explicó al sitio Autoblog que por lo general las leyes conllevan un período de adaptación y había un stock de vehículos que no contenían todos los elementos explicitados por la ley: “Nos pareció razonable el decreto, y establecer un período para liquidar esas unidades que ya estaban en Uruguay”.
LAS VENTAS CRECEN, LA INSEGURIDAD TAMBIÉN. De acuerdo a la Asociación del Comercio Automotor del Uruguay (ACAU), durante 2014 se vendieron en Uruguay 35.773 automóviles para pasajeros. De las marcas tenidas en cuenta para la estadística, alrededor de un 23,4 por ciento (8.374) de los autos que se vendieron, eran de marcas chinas. Los datos de ACAU revelaron que aunque las cifras de este primer trimestre en relación al 2014 en general cayeron, hubo una suba de un 5 por ciento en las ventas de automóviles para pasajeros, registrándose un acumulado de 10.196 ventas. Un alto porcentaje eran de origen chino. En Montevideo, según cifras de SUCIVE, de los 6.998 vehículos de categoría A que se empadronaron, se registraron 319 Lifan, 227 Geely, 693 Chery y 367 Faw, entre otras marcas chinas.
Latin NCAP, un programa de evaluación de autos nuevos en Latinoamérica y el Caribe que fomenta la fabricación de autos más seguros, realiza los ensayos de impacto frontal y lateral estipulados por la ONU y les otorga una cantidad de puntaje y estrellas considerando los resultados. Al evaluar los ensayos, se puede confirmar que las marcas menos resistentes suelen ser las de origen chino. Aunque hay excepciones.
En diciembre del pasado año se realizó el ensayo a un Lifan 320, que concluyó sin ninguna estrella tanto en seguridad para pasajeros adultos como para pasajeros niños, además de no poseer varios de los dispositivos acordados en la ley. La ANCOSEV aconseja comprar autos que obtengan al menos tres estrellas en las pruebas de Latin NCAP. Otros ejemplos que mostraron poco o un pobre nivel de seguridad, en los ensayos de Latin NCAP, son el Geely CK1 1.3 evaluado en 2010 y el Nissan Tiida Sedan evaluado en abril de este año.
A pesar de que próximamente habrá mayor control para que se cumpla la ley de tránsito, no deja de preocupar la continuada circulación de autos que no cumplen con un mínimo de seguridad indispensable. Y es que el parque automotor puede tardar un tiempo en renovarse.
Yobanna Costa

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