El proyecto ganador fue seleccionado entre 44 postulantes que se presentaron al llamado realizado por la Intendencia de Montevideo, el Ministerio de Educación y Cultura (MEC), la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de la República (Udelar) y la Sociedad de Arquitectos del Uruguay. Esta modalidad de intervenciones en espacios públicos surge tras la aprobación parlamentaria en 2018 del uso de “marcas de la memoria”, para habilitar la expresión desde diversos ámbitos de la sociedad de formas de tratamiento del repudio a los “hechos de actuación ilegítima del Estado acaecidos entre 1968 y 1985”. El costo total de la intervención arquitectónica en Punta Carretas será de aproximadamente 68 mil dólares.
“La mesa es un lugar natural de reunión. Alrededor de una mesa te juntás con amigos, charlás, decidís, construís sueños, recordás. Por eso fue natural para nosotros inspirarnos en una mesa”, explicó a Sala de Redacción Federico Lagomarsino, quien es la cabeza visible de un grupo de arquitectos y artistas visuales ganador del primer premio para la construcción del Espacio Memorial de la ex cárcel de Punta Carretas, donde actualmente funciona un centro comercial.
El proyecto triunfador de esta propuesta de intervención urbana, propone la construcción de un espacio integrado por una mesa y asientos de uso público. En la superficie horizontal del memorial figuran los nombres de los casi 500 presos políticos que fueron privados de su libertad en Punta Carretas. La intervención no tiene limitaciones de espacios, uso o formatos por parte del público y busca una apropiación colectiva diversa y natural del espacio y su significación.
Según lo anunciado el 15 de julio en una conferencia de prensa ofrecida en el MEC, el memorial podría ser inaugurado en octubre de este año. La titular de esa cartera, María Julia Muñoz, destacó la importancia de estas intervenciones en el espacio público, ya que “la memoria de los pueblos impide que se repita el terrorismo de Estado, las desapariciones forzadas, la violaciones de mujeres o tener gente presa solo por pensar diferente”.
El fallo del jurado destacó la “contundencia del mensaje” que propone la idea alrededor de una mesa. Se establece que hay una “adecuada síntesis expresiva de los elementos propuestos” alrededor de la ex cárcel y que entran en un diálogo balanceado “con los numerosos y fuertes estímulos visuales del entorno y del centro comercial”.
Enrique Chalar, vocero de Crysol, la asociación de ex presos políticos uruguayos, manifestó a Sala de Redacción su satisfacción por la concreción de este nuevo memorial, ya que “no solo es un sitio de memoria sino principalmente de reflexión, para los que estuvimos presos y fundamentalmente para nuestros familiares, que fueron los que más lloraron y sufrieron nuestra ausencia”. Chalar enfatizó que “desde la memoria se construye el futuro y, por tanto, este memorial será significante para las generaciones futuras”.
| Un poco de historia El “Penal y Penitenciaría Punta de Carretas” fue inaugurado por José Batlle y Ordoñez en 1915 y funcionó como establecimiento carcelario de alta seguridad hasta noviembre de 1986, durante la presidencia de Julio María Sanguinetti. Entre 1968 y 1985, se privó de su libertad allí a 478 presos políticos, según una investigación de la Udelar. Pasado el primer año de la reinstauración democrática y en medio de un sangriento motín carcelario, el entonces ministro del Interior, Antonio Marchesano, firmó a mediados de 1986 el cierre definitivo del establecimiento y el traslado de los reclusos. Tras cinco años de discusiones y enfrentamientos políticos sobre el destino del predio, un grupo de inversionistas europeos adquirió los padrones en 1991 para la construcción definitiva del centro comercial inaugurado en 1994. |
