Pocos competidores se han destacado a nivel internacional en el automovilismo uruguayo. Entre esos pocos se encuentran Eitel Cantoni y Alberto Uria en los comienzos de la fórmula uno por allá en el año 1952. Más acá en el tiempo y muy recordado por el pueblo uruguayo por su tragedia en la curva del autódromo de Laguna Seca (en el estado de California, Estados Unidos), Gonzalo “Gonchi” Rodríguez había generado muchas expectativas y se lo recuerda hasta hoy con mucho cariño.

Actualmente el joven piloto Santiago Urrutia desarrolla su carrera deportiva en el área de las ruedas. Comenzó su contacto con un vehículo desde muy pequeño en campeonatos uruguayos de motociclismo de velocidad en tierra y desde ese momento no ha dejado de acelerar dentro y fuera de la pista. 

Sus inicios fueron casuales. Según relató Urrutia a Sala de Redacción, su abuelo paterno muy “fierrero” y apegado a todo lo que es velocidad les regala una moto a todos sus nietos y el que tiene el coraje de probarla con apenas tres años es Santiago. En ese momento y casi sin darse cuenta se convertía en el piloto más joven en participar en un campeonato de velocidad en tierra uruguaya, pero con ciertas particularidades: tomando la mamadera en la moto en pleno campeonato y teniendo que poner unos taquitos para llegar a subir al rodado y comenzar la competencia. Eso no le impidió destacarse y en los dos años que participó en motociclismo logró cosechar varios títulos.

A los cinco años su carrera da un vuelco; viendo la peligrosidad de la motocicleta a una edad tan temprana, su madre le regala un karting y Santiago cambia de disciplina deportiva a cuatro ruedas, corriendo campeonatos en Uruguay y Argentina.

En el año 2010, luego de grandes temporadas en Argentina y de cosechar títulos todos los años, le llega la oportunidad de presentarse en el mundial de karting en Portugal, donde se destaca de la mano del equipo Intrepid. Al año siguiente y con tan solo 14 años toma la valiente decisión de radicarse en Europa. Sus padres vivieron con mucha incertidumbre este desarraigo tan temprano pero a la vez prometedor de Santiago. Allí comienza el Campeonato Formula Abarth Europeo 2012 con un nuevo equipo; de menos a más y en tan solo tres fechas, Santiago conquista su primer podio en Budapest y su primera carrera ganada en Mugello. 

Luego que la carrera deportiva de Santiago se viese truncada por falta de presupuesto en el viejo continente, sin bajar los brazos evalúa otras posibilidades. Es allí cuando -con tiempo de trabajo extra pista- desemboca en Estados Unidos. El propio Santiago relata que es un ámbito competitivo, pero sin tanta presión económica. Entonces comienza en la categoría Pro Mazda, donde se destaca por ganar el campeonato en Laguna Seca y realizar un homenaje a su referente automovilístico en la curva en la que Gonzalo Rodríguez perdiera la vida. 

Después de algunos galardones su camino siguió, se animó a más y es ahí donde comienza la lucha por la llegada a la máxima categoría estadounidense: la Indiy Car. La gesta deportiva del campeonato Pro Mazda y la negociación con sus sponsors uruguayos le dan la posibilidad de ingresar a las filas de la Indiy Light, antesala de la máxima categoría estadounidense de pilotos de fórmula. Empieza otro sueño, corre varios años destacándose pero no llega a niveles que le permitan ascender de categoría. 

En 2019 vuelve a Europa por no haber llegado con el presupuesto para la Indiy Light y al no lograr conseguir una butaca, corre el campeonato de turismo por un equipo europeo con un Audi RS 3 de WRT Racing Team. Es en ese momento donde su carrera deportiva se empieza a definir sin sospecharlo para nada.

En el 2020 le llega ese momento con el que soñó durante toda su carrera y finalmente es contratado, ahora sí profesionalmente. Esto significa que ya no tendrá que jugar doble carrera con los sponsors y la de la fecha del certamen.  Ahora es libre de dedicarse a lo que sabe, ya que fue aceptado después de largas pruebas por el equipo chino/sueco Lynk & Co Cyan Racing para competir en el campeonato mundial de turismo y conducir el cuarto vehículo del equipo en el certamen que comienza en setiembre.

“I’m ready” escribió el piloto a principios de setiembre en sus redes sociales. Foto: Twitter de Santiago Urrutia.

Fiel a su estilo y a sus valores familiares, Santiago vuela desde Mid Ohio (donde estaba compitiendo la Fórmula 3 americana debido a la suspensión de la Indy Ligth por el COVID-19) a Suecia. Se baja del podio de la última carrera que disputó sin bañarse y ayudado por un uruguayo que lo lleva al aeropuerto para abordar el avión. Cuando llega a Anderstop (Suecia) y antes de ir al autódromo pasa por una tienda, compra una camisa, un pantalón y se presenta ante los dirigentes del equipo con un aspecto que genera una gran impresión; de los cuatro postulantes a la butaca el uruguayo era el que estaba más prolijo. Los demás vestían bermudas. 

El piloto hoy recuerda la escena y agrega que lo de vestirse tan elegante para la llegada al equipo “viene de familia”, principalmente inculcado por su abuelo Eduardo quien consideraba que la presencia es muy importante. 

Así es como comienza una nueva historia para el joven piloto Santiago Urrutia ya cerrado su pase a la alta categoría de la elite automovilística.

Volver a los primeros valores 

El talento viene acompañado de mucho trabajo y de importantes valores inculcados desde temprana edad. Así como su madre (maestra) le compró el karting porque era menos peligroso que la moto, también junto a su esposo y familiares lo educaron en el respeto, el trabajo y la generosidad. Asimismo, desde sus comienzos estuvo acompañado por un entrenador físico y un psicólogo que ayudaron a su formación, tarea que aún continúa. Santiago fue desde chico un niño sanamente pícaro y esa picardía junto al espíritu competitivo ha sido lo que le ha permitido llegar. 

El joven es muy querido en su comunidad (Colonia Miguelete, Colonia), en parte porque siempre tiene el tiempo de visitar los sitios como la escuela que lo formó. Se siente orgulloso de representar a Uruguay teniendo presente que por muchos años los uruguayos lo han apoyado para competir en los niveles que participó. Esponsorizado por empresas estatales, siempre buscó la forma de dejar bien representado al país en el exterior. Ejemplo para los niños y jóvenes, Santiago demuestra que con trabajo y sacrificio (renunciando a sus deseos de adolescente como compartir tiempo con amigos para viajar a la ciudad de turno a concentrarse en su carrera deportiva), se logran los objetivos.

En una entrevista a larga distancia, el joven detalla que “esta nueva oportunidad profesional surge luego de que un piloto del equipo se da de baja y queda una butaca libre. Entonces fueron contactados cuatro pilotos a una prueba de tres días donde nos evaluaron de todo, abajo y arriba del auto. Simplemente intenté dar el 100% de mi en todos los aspectos y finalmente quedé seleccionado”. Lograr ser piloto profesional y el primero en la historia de Uruguay “es algo muy lindo y ojalá sea el comienzo de muchos años”, resume.

La sensación del piloto migueletense es de felicidad, pero también de concentración enfocada en lo que se le viene. Debe estar física y mentalmente muy preparado para el desafío de enfrentar a los mejores pilotos: “tengo que lograr ser competitivo y ayudar al equipo a ganar el campeonato del mundo”, sostuvo.  Esas son las metas que se traza el piloto Urrutia, aliviado al no tener que buscar sponsors para esta temporada.  Como nunca antes corrió con esa tranquilidad, no tiene claro los efectos que le causará a la hora del manejo, pero estima que serán positivos y que se siente tranquilo. Agrega que se adaptó muy bien al equipo, con el que se encuentra en plena pretemporada, viajes y muchas pruebas, pero le gusta la dinámica de trabajo y se siente cómodo. Se percibe en su diálogo a la hora de contar los detalles.

Actualmente vive en Barcelona y para estar en forma entrena en doble horario todos los días menos los sábados. Realiza diferentes tipos de actividades físicas marcadas por un profesor del equipo y cuando está en inactividad deportiva, también se mantiene activo físicamente tanto en su pueblo natal como en Montevideo.

Más allá de lo deportivo, admite: “estoy más maduro, hablo tres idiomas, vivo tranquilo y disfruto más”. Se manifiesta con más alegrías que presiones, con más disfrute a la hora de prepararse, sigue extrañando pero está contento con la posición que ha logrado: “quiero que arranque el campeonato para medirme con los mejores”.

 Siempre resalta el apoyo familiar el que ha sido fundamental en su carrera; “al fin y al cabo, gane o pierda, siempre voy a regresar a mi casa y me van a recibir de la misma manera”.

FacebookTwitter