El conversatorio, que tuvo lugar en el aula magna de la Facultad de Ciencias Económicas y Administración el mismo día que la reforma se aprobaba en el Parlamento*, contó con la participación del abogado Rodolfo Saldain, el economista Hugo Bai, Iván Posada y Gustavo Olmos -diputados por el Partido Independiente (PI) y el Frente Amplio (FA) respectivamente-, y los profesores Iana Rossi  y Gonzalo Zunino. La periodista Pilar Teijeiro ofició como moderadora. 

El decano Jorge Xavier destacó la importancia del encuentro en el marco de la votación de la reforma, en especial la pertinencia de este conversatorio en el ámbito universitario con proyección “hacia afuera”.

Rossi comenzó su disertación al respecto de la estructura del sistema previsional actual y sus características, puntualizando las fortalezas y debilidades del mismo. Destacó como principal fortaleza “la profesionalización de la seguridad social, con la existencia del registro de historias laborales” creado por la reforma de 1995. En relación a las debilidades, hizo énfasis en las “elevadas comisiones de las AFAPs” agregando que “mucho de lo que aportás para financiar la jubilación se va en costos administrativos”.

Por su parte, Zunino reflexionó sobre las reformas anteriores al sistema actual. Entendió que “no han madurado” ya que “tenemos un proceso de continua renovación, sin que las reformas queden totalmente plasmadas” y esto se da porque “la realidad muchas veces no coincide con los datos calibrados previamente”. Sobre los motivos para reformar el sistema actual, puso atención sobre “la insostenibilidad fiscal”, es decir, una diferencia (mayor) de egresos que ingresos. “Me queda la duda de qué tanto se avanza en términos de inequidades [con esta nueva reforma]”, dijo sobre el cierre de su participación.

Técnicos y políticos

Saldain, integrante de la Comisión de Expertos en Seguridad Social  (CESS) que asesoró al gobierno en este proceso, detalló los impactos de la nueva reforma a nivel del gasto y destacó la importancia de la Agencia Reguladora de la Seguridad Social creada con este proyecto como controladora de la gestión, en el entendido de que “no está asegurada la sustentabilidad”. Agregó que “es imposible lograr un equilibrio fiscal en un sistema previsional como el nuestro” pero que “el desfinanciamiento debe ser controlable”. “Se contempla las largas carreras laborales, que se podrán jubilar antes” y entendió que “la suba de la edad jubilatoria es de las más pausadas que existe en todos los procesos de reforma en países similares”. En este sentido, el abogado expresó que “si no se sube la edad jubilatoria, se bajan las jubilaciones”.

Por su parte, Bai abordó las “inequidades” de la actual reforma con énfasis en las jubilaciones militares (“se seguirán retirando durante muchos años en condiciones de privilegio”), a la vez que recordó que el PIT CNT propuso un impuesto a “las altas jubilaciones militares”. Entendió qué “no hay ningún cambio relevante” en cuanto a los medios de financiamiento e indicó el aspecto “crítico” de la reducción del IASS que “paga el 25% de las pasividades más altas”. Sobre el final de su participación, habló sobre el cambio realizado por Diputados acerca de los 25 a los 20 mejores años de actividad que se comprenden para el monto jubilatorio. Recordó que “cuando el PIT CNT puso énfasis en este aspecto negativo, se dijo que cambiar esto era poner en jaque la sostenibilidad del sistema”. 

El diputado Posada (PI) indicó las razones por las cuales abordar esta reforma: “existe una tendencia demográfica que impone la necesidad de hacer correcciones al sistema previsional. La expectativa es que en los próximos veinte años, por cada persona mayor de 65 años van a haber tres que tengan entre 24 y 64, con una clara tendencia a la reducción de la población”. “Tenemos una mirada crítica [como Partido Independiente]” sobre la rebaja del IASS. En este sentido, entendió que este compromiso “es realmente inconveniente”. Posada abordó las jubilaciones militares y enfatizó: “este cambio que se está haciendo con la reforma es el más importante desde la restauración democrática” y apuntó que los cambios que se habían hecho en los últimos quince años fueron muy tímidos. Con respecto al financiamiento, indicó que “existen muchas exoneraciones que no corresponden” y añadió que “tenemos que comprometernos todos los partidos políticos a hacer una revisión seria”. En el cierre de su participación, destacó la novel calificación de la agencia Standard & Poor’s para Uruguay, la cual subió dos escalones el grado inversor por las mejoras en la políticas fiscales.

El diputado Olmos (FA) se diferenció de Posadas en cuanto al diagnóstico y opinó que “el objetivo que persigue este gobierno está focalizado en los temas de sustentabilidad financiera y los de sustentabilidad social, en los que tenemos problemas, quedan relegados”. En este sentido, indicó que “hay gente que nunca llega a configurar las causales jubilatorias” y agregó que “a medida que pasa el tiempo esto se agrava”. “Esta reforma busca una equiparación en términos de prestaciones, pero no toca las desigualdades en términos de aportes”, opinó. Asimismo, llamó a ”buscar otras fuentes de financiamiento” y puso como ejemplo a las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) “que muchas veces son extranjeras” y no pagan aportes patronales. “Aumentar la edad a 65 era una medida posible” pero “el problema que tiene es que sea ‘al barrer’ para todos los sectores” puntualizó. El frenteamplista trajo a colación un estudio realizado por la economista Graciela Sanroman en la etapa de diagnóstico: “en los países donde se modificó la edad, el 50% trabaja hasta la nueva edad de retiro y la otra mitad queda por el camino”, por lo que estos últimos “requerirán prestaciones de otro tipo, que terminan teniendo un costo fiscal y afectarán el objetivo de estabilizar los números”, finalizó. 

*El conversatorio se encuentra disponible en el canal de Youtube de la Udelar y de TV CIUDAD.

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