Fueron varios los programas de las radios públicas que esta semana auniciaron sus últimas emisiones, después de varios años al aire. El motivo es la no renovación de más de 40 contratos definida por las autoridades del Servicio de Comunicación Audiovisual Nacional (Secan) semanas atrás, por considerar que no se ajustan a los lineamientos de la nueva administración. Este hecho, que había sido previamente denunciado por el Sindicato Único de Trabajadores de las Radios del Estado (SUTRE), tomó mayor trascendencia luego de la conmemoración de la noche de los cristales rotos que celebró la comunidad Judía de Uruguay, ya que, según informó El País, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, en señal de apoyo le dijo al presidente del Secan, Gerardo Sotelo, que tenía que “echar a alguno más”.
Cuando conoció la decisión del Secan, SUTRE emitió un comunicado en el que manifestó preocupación por la medida y aclaró que no participó de la decisión de las autoridades. En diálogo con Sala de Redacción, Daina Rodríguez, presidenta de SUTRE, aclaró que las medidas se tomaron inconsultamente, a pesar de que el sindicato mantenía un diálogo fluido con los jerarcas del Secan. En el comunicado, SUTRE señaló que comprende las medidas de austeridad y el cambio de perfil en la programación que pretende el nuevo gobierno, pero, por otra parte, marcó que se dará de alta a 16 nuevos contratos, entre ellos algunos correspondientes a cargos técnicos que serán cesados a fin de año.
Además, la presidenta de SUTRE contó que un acuerdo bipartito realizado en setiembre establecía que, cuando el Secan decidiera cesar a un trabajador, se le diera aviso dos meses antes y no uno, como está previsto en los contratos actuales.
La gota que derramó el vaso
Si bien en un principio el sindicato había declinado hacer valoraciones políticas para mantener el diálogo abierto con las autoridades, en una entrevista con El País, Sotelo justificó la no renovación de los contratos alegando que en 15 años las radios públicas no superaron un punto de rating en las mediciones de audiencia, lo que generó malestar entre los trabajadores.
Rodríguez lamentó que Lacalle Pou haya “alentado a que más gente se quede sin trabajo el 1 de enero”, más allá que desde Presidencia de la República se haya argumentado que se trató de dichos que fueron “sacados de contexto”. Por su parte, lamentó que haya “40 compañeros cesados en un sector que lleva cerca de 500 personas en la calle en plena pandemia”, en referencia a lo que está ocurriendo este año en los medios de comunicación y el periodismo. La presidenta del SUTRE también mostró preocupación por la naturalización e institucionalización de un “prejuicio” hacia los medios públicos, que los dichos de Lacalle Pou acentúan. “Los trabajadores de las radios del Estado somos profesionales con currículums y experiencia de larga data”, replicó.
En un nuevo comunicado, la semana pasada SUTRE señaló que entre los trabajadores de las radios del Estado hay profesionales y técnicos con diversas orientaciones editoriales y políticas. En ese sentido, exhortó a que las producciones de estos medios se evalúen en base a criterios profesionales. En suma, desde el sindicato lamentaron que a los trabajadores cuyos contratos no fueron renovados no se les haya comunicado el motivo.
Al cruce
Desde la oposición política, el senador socialista Daniel Olesker realizo un pedido de informes ante el Ministario de Educación y Cultura, del que depende el Secan. En él consultó sobre los criterios que el Secan tuvo en cuenta para no renovar los contratos, si se tiene previsto la incorporación de nuevo personal y, en ese caso, para qué cometido y bajo qué forma de ingreso. Por su parte, el senador comunista Óscar Andrade público en su cuenta de Twitter: “Sería bueno que por la sensibilidad de miles y miles de uruguayos que la están peleando diariamente, [Lacalle Pou] se disculpara por esas afirmaciones” en las que bromeó con Sotelo sobre la desvinculación de más trabajadores. En tanto, a través de la misma red social, el PIT CNT se preguntó: “¿Cuánto vale tu trabajo para el gobierno? El país no es una empresa que se recorta en personal para llegar a los números”.