MÁS QUE 3 PUNTOS
El programa Gol al Futuro surgió en 2009 y apuntó a fomentar el estudio al mismo tiempo en que los jóvenes uruguayos practican el fútbol. En otras palabras, sin estudio no hay pelota. Actualmente, 3.500 jóvenes participan del proyecto, que crece de gran manera año tras año en sus tres áreas de implementación: el área de deportes, integrada por profesores de educación física; el área médica, conformada por psicólogos, médicos y podólogos; y el área educativa, de la que forman parte educadores, profesores y psicólogos. Consultado sobre la dinámica de funcionamiento, Ferrari afirmó que “los psicólogos deportivos trabajan conjuntamente con las otras aéreas, a pesar de que se aspira a intercambiar información y trabajar en forma conjunta y multidisciplinaria para ampliarlo”.
El 15 de agosto en el Museo del Fútbol del Estadio Centenario se presentó el informe general del programa, donde se plantearon alternativas y modificaciones que permitieran una mayor satisfacción a trabajadores y a los jóvenes que integran el proyecto. “Lo que hemos hecho desde 2009 a la fecha es reajustar, revisar, o modificar algunas cosas. Ningún año hicimos lo mismo, siempre se modifica, se agrega o quita algo”, añadió Ferrari.
El Consejo de Educación Técnico Profesional (CETP), que forma parte del programa, considera que existen varios objetivos primordiales en su desarrollo. Según consigna la pàgina web de Presidencia de la República, entre ellos están la estimulación en la inserción de jóvenes en el sistema educativo, el desarrollo de alternativas, generar instancias de capacitación y formación dirigidas a familias, y el seguimiento a jóvenes que abandonan el fútbol. Ferrari señaló que en los últimos años se han agregado talleres con padres y cursos de entrenadores, que generan mucha satisfacción debido a que la recepción es grande y muy buena. “Hay una demanda grande entrenadores. Seguimos haciendo intervenciones. Un psicólogo trabaja con una categoría para demostrar lo que hacemos, y es una forma de estar presentes de toda manera”, justificó el coordinador.
Consultado por las metas propuestas para el año que viene, Ferrari destacó cinco puntos principales. Entre ellos está la colaboración en la formación integral de los jóvenes, punto fundamental del proyecto. “Lo que nos interesa es colaborar en la formación de seres sociales adaptados a nuestra sociedad. Sin este punto, no se puede hacer nada más”, planteó. En segunda instancia, se atenderán las demandas que necesiten jugadores y cuerpo técnico para seguir adelante con el trabajo en el programa. Los restantes puntos abarcan la utilización de más herramientas de trabajo a los entrenadores en las diferentes prácticas y el trabajo a partir de talleres sobre las dificultades que pueda tener un adolescente.
“Los problemas propios del deporte los tenemos que trabajar nosotros y, en algunos casos, mostrar cómo se trabaja”, agregó Ferrari, quien calificó como un “gran trabajo” a lo realizado por entrenadores en los diversos sectores del proyecto. “Hay que hacerle ver a los entrenadores que su figura y trabajo es relevante para los adolescentes. Es un modelo, un ejemplo a seguir. La forma de comportarse, de hablar, de entrenar, de trabajar es muy importante para los chiquilines. La figura del entrenador no está tan valorada por dirigentes o por quienes determinan quienes van a ser las personas que trabajan con las formativas del club. Es un elemento bastante complicado en el que nosotros estamos tratando de hacer hincapié y colaborar para formar mejores entrenadores”, puntualizó.
Se espera que el programa siga creciendo y que busque diversas herramientas para continuar fomentando el estudio en miles de niños y adolescentes de todo el país. “Para un futuro esperemos seguir en este camino, con objetivos propios del programa y no nos cerramos a seguir agregando cosas”, concluyó el coordinador de psicólogos del programa.
Mathias Tilve