Un simposio en la Escuela Universitaria de Música (EUM) dio inicio a un debate sobre la inclusión de la música popular en la formación de los estudiantes. En ese sentido se presentaron las actividades que se realizarán en el segundo semestre lectivo y la experiencia de Argentina, una referencia a seguir.
La idea del encuentro fue poner sobre la mesa el tema y discutir de qué manera se puede insertar la música popular en la universidad, sostuvo el director de la EUM, Leonardo Croatto, durante el encuentro del lunes 13 de agosto. Y agregó que el plan de estudios vigente es del 2005 y que si bien se ha avanzado en la inclusión de este género musical, sigue sin ser suficiente. No está estipulada aún la modalidad, pero en el simposio adelantaron que las opciones que se manejan son crear una nueva carrera o agregarla como opción a las ya existentes.
Algunos estudiantes pidieron estar en el grupo académico que trabaja para agregar la música popular a la carrera. El profesor Andrés Bedó, docente de “Práctica de conjunto en música popular” en la EUM, pianista, arreglador y compositor, ha encabezado la realización de propuestas en torno a la inclusión del género popular. También participa en el Grupo de Trabajo de Músicas Populares en la EUM desde 2016. En este semestre, ya se agregaron varias materias optativas y seminarios en torno a ésta temática y se llevarán a cabo varios cursos de educación permanente entre los que se destacan Música Folclórica del Río de la Plata, Música popular y música culta, La batería de murga como ensamble solista, El lenguaje de tango en la guitarra y un taller de música latino caribeña, entre otros.
La idea del director de la EUM es agregar contenidos y conocimiento pero mantener la formación que reciben los estudiantes actualmente: “personalmente creo que la formación integral del músico debe tener un abanico muy amplio, y aunque te vayas a dedicar a la música clásica, tener un cierto dominio de música popular es bueno. Y si te vas a dedicar a la música popular también poder manejar las herramientas de la formación clásica”, dijo Croatto a SdR.
Uno de los invitados internacionales fue Damián Kees, director de Instituto Superior de Música de la Universidad Nacional del Litoral de Argentina. Kees aseguró que cada lugar tiene su proceso y no en todos los territorios se da la inclusión de la música popular en la universidad de la misma manera. La primera carrera de música popular surgió en 1996 pero no tuvo los resultados esperados y cambiaron el programa de estudios. “Si bien en Uruguay se empezó a debatir no hace mucho, en otros países la música popular en la academia se tuvo que abrir un poco a los codazos, porque no encontraban esos espacios que quizás aquí sí tengan”, afirma Kees.
En Argentina existe una Licenciatura en Música Popular, muy relacionada a los espacios de investigación y la práctica profesional. También tienen un profesorado que los habilita a dar clases en el sistema educativo, desde jardín al secundario. Este es el primer año de la licenciatura, por lo que los primeros egresados se recibirán en 2022.
Esta licenciatura decidió manejar la concurrencia y no hacer demasiada publicidad para comenzar de a poco, debido a que en otras partes de Argentina carreras similares se llenaron de estudiantes lo que trajo problemas tanto a nivel de infraestructura como de cargos docentes. “Tuvimos muy poca comunicación. Hubo 50 inscriptos, la misma cantidad que para profesorado y en este momento están cursando en forma real 25. Cuando fueron al curso de articulación se dieron cuenta que no era lo que esperaban o que quizás se les complicaba más de lo que pensaban”, afirmó Kees.
Entre las asignaturas cuatrimestrales propias que tiene la licenciatura en Argentina, se encuentran el Taller de rítmicas Latinoamericanas, Taller de rítmicas argentinas, Seminario de Tango, Seminario de Folclore, Seminario de composición de canciones, Seminario de Rock y Música Urbana. Según Kees, el espacio diferente al resto -anual y con mucha carga horaria- es Práctica de Conjunto, la que para él “es el corazón de la carrera”. También tienen asignaturas dedicadas a los instrumentos relacionados a la música popular y en el último año incluyeron una cátedra denominada Actividad musical en el contexto de trabajo, vinculada a la autogestión y al conocimiento de las leyes; tiene el fin de dar herramientas a los estudiantes para que puedan autogestionarse y sean capaces de producir su propio espacio de trabajo una vez que se gradúen.
También estuvieron presentes en el encuentro el músico Rubén Olivera -quién hizo énfasis en el vínculo de las músicas populares y la sociedad-, y el secretario general de Agadu Diego Drexler realizó una breve introducción del Derecho de autor. De la región fueron invitadas Analía Chernavsky y María Beatriz Cyrino de la Universidad de la Integración Latinoamericana (UNILA) para hablar de la música popular y la música culta en cuanto a la creación, práctica y repertorio. Hubo también un espacio de estudiantes y el encuentro finalizó con una actividad musical-didáctica a cargo del payador Juan Carlos López, Andrés Bedó y sus alumnos, también Nicolás Arnicho junto a sus estudiantes.
Eliana Vila