La nueva versión de Thor. Foto: tomada de marvel.com.
Desde que las empresas Marvel y DC (ambas productoras de comics) comenzaron a poner a sus figuras en el cine, éstas han ido cambiando sus características para cautivar a la mayor cantidad de público posible.
En un comienzo el superhéroe cumplía con ciertas características que lo conformaban como tal. Por ejemplo, poseía cuerpo grecorromano; sin embargo hoy en día los parámetros físicos son muy distintos, sujetos a la imagen que trasmite Hollywood de “niño bonito”. No es casualidad que en la lista de los actores mejor pagos de la industria aparezcan Robert Downey Jr., que interpreta a Iron Man; Chris Hemsworth, actor que encarna a Thor; Christian Bale, que interpretó la ultima trilogía de Batman, y también Ben Affleck, quien será la imagen de este último personaje.
Desde su incursión en la industria cinematográfica, las historias de superhéroes incorporan situaciones románticas. No es frecuente ver tantos sentimientos amorosos en los comics,:sin embargo, en la pantalla grande estos aparecen reiteradamernte, volviéndose así el punto débil del superhéroe y muchas veces su motivo de lucha a la hora de enfrentar a sus villanos, como se puede ver en Spiderman y Thor.
Una de las grandes críticas que se hace en la actualidad a estas figuras de comics es el grado de violencia que manejan, suelen estar motivados por un sentimiento de venganza como es el caso de Hulk e Iron Man, dejando de lado el sentido de justicia.
Por otra parte, los villanos cada vez se aferran mas al concepto que los caracteriza, la maldad. Lo peculiar es que en muchos casos el público suele identificarse más con ellos que con el protagonista, como pudo verse con Loki (villano de Thor y Los Vengadores) y con el Jocker o Guasón en su aparición en Batman: el caballero de la noche.
Las apariencias engañan. La empresa Marvel anunció que habrá un cambio radical en el Capitán América y en Thor, que se alejarán del estereotipo que nos tienen acostumbrado.
El dios nórdico del trueno, Thor, se convertirá en mujer. No será la esposa de dicho personaje, ni tendrá lazo de parentesco alguno, sino que suplantará completamente a la versión masculina, manteniendo el mismo nombre y sus poderes. La razón principal que lleva a este cambio es la intención de captar al público femenino para el mundo del comic.
No es la primera superheroína que protagonizará una saga de comics en Marvel, sino que se suma a una larga lista en la que están Picara (que también formó parte de los X-men), Miss Marvel, Bruja Escarlata, Spider Woman -que tuvo apariciones en Spiderman, y Puñan- entre tantas otras.
El Capitán América será encarnado por Sam Wilson, un personaje afrodescendiente, que hasta el momento combate el mal bajo el traje del superhéroe Halcón. El traje será levemente modificado, con los colores iniciales pero se le agregan alas y la capacidad de volar. El personaje de Steve Rogers (antiguo Capitán América) no será eliminado, será el ayudante y consejero estratégico de Sam.
Con esto se busca darle una imagen más desestructurada al Capitán, ya que no será llevado adelante por un soldado, sino que Sam ha dedicado parte de su vida al trabajo social, lo cual lo acerca más a la gente. Además tiene la cualidad de haberse criado en el siglo XXI y no en los años treinta. Es que cuando Axel Alonso asumió como editor en jefe de Marvel, prometió que la compañía iba a crear un universo tan amplio y diverso como sus lectores, buscando fomentar la idea de que mas allá de la religión, procedencia o sexualidad, todos pueden llegar a pensar en la idea de ser superhéroes.
Joaquín Castro
