QUE LEVANTEN MANOS
Los funcionarios de la Corte Electoral reclaman que para las elecciones nacionales de octubre se vuelva al antiguo sistema manual y alertan sobre la vulnerabilidad del sistema informatizado aplicado, “que hizo agua por todos lados”.
En la reciente elección interna de candidatos presidenciales, se estrenó el nuevo sistema para el conteo de votos en aproximadamente la mitad de los circuitos del país, pero la innovación trajo errores en el escrutinio y enlenteció la confirmación de los resultados finales.
El presidente de la Asociación de Funcionarios Electorales del Uruguay (AFEU), Gonzalo Castellano, declaró a Sala de Redacción que “en octubre no se puede utilizar este sistema porque puede llegar a provocar algo más grave. Si no hubiera sido por las encuestadoras, el domingo (de la votación) hubiéramos tenido una crisis electoral”, ya que no iba a saberse el resultado de la interna del Partido Nacional.
La Corte Electoral decidió, para la elección interna, aplicar por primera vez en Uruguay un sistema informatizado, instalado a través de computadoras del Plan Ceibal. Esta innovación, que se aplicó en 3.548 circuitos de todo el país, había sido probado previamente en las elecciones universitarias de marzo. La aplicación informática permite el control del padrón de votantes y transmitir inmediatamente los resultados de la elección a un centro nacional de cómputos.
Una delegación de la OEA, que monitoreó el funcionamiento del sistema durante las elecciones universitarias, envió un informe a la Corte Electoral en abril, donde explicaba las “debilidades” de la aplicación y recomendaba una serie de modificaciones para evitar la “vulnerabilidad del sistema informático” y su incidencia en el proceso electoral.
Los expertos advirtieron que no había “herramientas o procedimientos de seguridad” para impedir ataques cibernéticos al sistema, en el entendido de que un publicador de resultados electorales es un “blanco” tentador. A su vez, detectaron que la página web que publica los datos de la votación es “vulnerable a códigos maliciosos” y que es posible “tomar el control” del servidor. Además, señalaron que existía falta de capacitación técnica de los funcionarios públicos que trabajaban en los lugares de votación.
Para Castellano, el informe de la OEA “era lapidario” pero la Corte Electoral “no lo tomó en cuenta ni aplicó ninguna de las medidas” recomendadas por los expertos. También aseguró que el antiguo sistema manual de conteo de votos “era más seguro” y recordó que “era reconocido internacionalmente” por su certeza en la divulgación de los resultados. “Para cambiar un sistema así se debe hacer en serio y no de forma improvisada”, agregó.
A su vez, el presidente de AFEU cuestionó las declaraciones del vicepresidente de la Corte Electoral, Wilfredo Penco, quien atribuyó los errores en varios escrutinios a fallas de digitación de los funcionarios. Explicó que “está comprobado que el sistema daba diferencias cuando los escrutinios estaban bien cerrados”, por una falla con los votos en blanco parciales, lo que generó que los delegados partidarios se fueran de los circuitos sin el acta oficial y “se vulnerara así una garantía fundamental” del acto eleccionario.
En contrapartida a la visión de los funcionarios, la Corte Electoral evaluó como “exitosa” la aplicación del nuevo sistema informatizado y reconoció “pequeños inconvenientes” relacionados con problemas eléctricos o de conectividad a Internet, según lo manifestado por los ministros electorales a diversos medios de prensa.
“Los representantes de la Corte declararon que se deben hacer ajustes, pero es mucho más que eso, porque es un sistema que hizo agua por todos lados y no se puede seguir con experimentos irresponsables de cara a la elección nacional”, respondió el representante gremial.
Según los datos manejados por AFEU, el nuevo sistema tuvo inconvenientes en más de la mitad de los circuitos en los que funcionó. Ante esto, Castellano informó que el sindicato recopilará todos los errores producidos por la novel aplicación y con el apoyo del Pit-Cnt comenzará una ronda de reuniones con los partidos políticos para reclamar que no se vuelva a utilizar en octubre.
Edward Braida / Sebastián Bustamante / Mathías Da Silva