A menos de dos meses de las elecciones internas, Andrés Ojeda se ve a sí mismo como una figura con “presencia renovadora” que podría ayudar a cambiar la imagen del Partido Colorado (PC), acompañado de “una generación diferente”, caracterizada por su “energía” y “empuje”.
En conversación con Sala de Redacción, Ojeda destacó la importancia del trabajo en equipo y la disciplina como elementos fundamentales de su estrategia política. En sus propias palabras, recorrer el país implica “mucho cansancio” por el “esfuerzo sideral” que conlleva, aunque también reconoce que la situación representa “un sueño cumplido” para él.
A pesar de su apuesta por el trabajo en equipo, el precandidato aclaró que su postura se distingue por su firmeza y determinación a la hora de diferenciarse de los líderes políticos de otros partidos. Su intención es establecer una identidad política propia basada en principios y valores que considera esenciales para el progreso del país, con propuestas vinculadas al fortalecimiento de la seguridad y a la reducción de la pobreza. Consultado sobre sus objetivos electorales, fue claro al manifestar su deseo de ser “uno de los integrantes del equipo de la coalición que vaya a octubre a enfrentar al Frente Amplio”.
Ojeda, ex abogado del Sindicato de Funcionarios Policiales de Montevideo y del ex guerrillero tupamaro Amodio Pérez, lidera la interna del PC, con 28% de intención de votos, según la encuesta publicada por Opción Consultores el 29 de abril. Le siguen el ex presidente del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública, Robert Silva, que acapara 21%; el ex presidente de Antel, Gabriel Gurméndez, con 14%; el ex ministro de Turismo, Tabaré Viera, con 13%; el ex director nacional de Telecomunicaciones, Guzmán Acosta y Lara, con 3%; la ex vicecanciller Carolina Ache, con 2%, mientras que la militante Zaida González Legnani no alcanza el 1%. Sin embargo, un 18 % del electorado colorado aún no sabe a quién votará el próximo 30 de junio.
Si bien Ojeda lidera las encuestas, está lejos de una mayoría absoluta y eso fue algo que llevó al diputado colorado y ex fiscal Gustavo Zubía a bajar su precandidatura, el mes pasado, para unirse al abogado como forma de reforzar su liderazgo. Según el ex fiscal, la alianza apunta a evitar la victoria de Silva en las internas, quien a su entender “representa una centroizquierda dentro del partido”, lo que añade matices ideológicos al panorama político interno. Para las elecciones de junio el PC es el más fraccionado y el acuerdo entre Ojeda y Zubía podría alterar significativamente la dinámica política.
En el plano político, Ojeda ocupó un cargo como edil del PC en Montevideo entre 2010 y 2015. Años después, se uniría al sector Ciudadanos, del ex canciller Ernesto Talvi; para las elecciones departamentales de 2020 fue designado como primer suplente de la candidata a la Intendencia de Montevideo por la coalición, Laura Raffo.
“Llegó el momento de Unir Para Ganar!, Vamos juntos?” fue el eslogan que usó Ojeda en un posteo en redes sociales que hizo el 11 de noviembre de 2023 para lanzar su precandidatura a presidente de la República. El hoy precandidato también tiene una historia de protagonismo en los medios, al aparecer en programas televisivos como Esta boca es mía, de Canal 12, y Podemos hablar de Canal 4.
Ojeda se remitió a la diferencia generacional representada en su corriente, si bien enfatizó que su campaña va “más allá” de la edad y se relaciona también con su “estilo”. Incluso recalcó cómo, relacionado a ello, “la gente que más aplaude es la gente de mayor edad”. En particular, destacó la presencia de un “estilo juvenil” caracterizado por su “cercanía”, energía y determinación, en contraste con el enfoque más racional y reflexivo que tradicionalmente ha definido a la política, y en particular al PC, apuntó.
De esta forma, expresó su creencia de que su equipo será capaz de aportar una “presencia renovadora” a la política. En línea con ello, el precandidato dijo que es el único que participa activamente en la “discusión real” en las internas, y destacó que no cuenta con el respaldo de un cargo gubernamental.
Consultado acerca de si se ve como ganador de la interna de su partido, señaló que no considera una derrota como posible en este momento. De todas formas, entiende que independientemente del resultado, “es un hecho” que su grupo podrá presentar una lista al Senado así como múltiples listas de diputados en todo el país, por lo que no cambiará su perspectiva. Según sintetizó, su “proyecto político” es “a largo plazo”, con el objetivo de posicionar representantes que compartan sus posiciones políticas, dentro del gobierno o como una oposición activa.
Luego de ser consultado sobre el panorama político interno del PC y sobre si mantiene o no muchas diferencias con los demás precandidatos, Ojeda dijo haber “hecho caudal de la fraternidad” desde un principio y llamó a enfocarse en el futuro.
Según afirmó, en la actualidad no existen grandes diferencias ideológicas entre los candidatos, por lo que en su opinión, lo que la gente buscará al elegir son perfiles: quién le agrada más como líder, tanto para dirigir un partido como para formar parte del equipo de la coalición que se enfrentará al Frente Amplio en las elecciones de octubre.
Para Ojeda, cuyo punto fuerte revuelve en torno a propuestas en seguridad pública, el PC tiene “las mayores credenciales” y “los interlocutores más importantes” para contender con el Frente Amplio en dicho ámbito, y le achacó al partido de izquierda “no tener interlocutor de seguridad” ni un candidato designado a ocupar el Ministerio del Interior.
El precandidato aclaró que “no existen soluciones mágicas”, y manifestó que “hay que ser justos” porque el gobierno logró reducir los números de rapiñas, hurtos y homicidios de manera significativa. A su entender, el objetivo es lograr “una mejora sideral en seguridad pública donde la gente diga estamos mejor” y que “la clase media uruguaya sienta una mejora para llegar a fin de mes”. “Lo que hagamos de ahí para arriba, [es] todo plus”, concluyó.