Librofest es una convención literaria organizada por el Club de Lectura Uy, un espacio autogestionado y sin fines de lucro que formaron, cinco años atrás, tres grandes lectoras: Joanna Peluffo, Stephanie Campi y Agustina Aguilera. Las ganas de emprender este proyecto surgieron de un problema en común: el hecho de terminar un libro y no tener con quién compartir todo lo que esa historia les había dejado.
“Surge por la necesidad de debatir y sentir que hay un espacio donde se puede hablar de libros”, comentó Joanna. Los miembros del club se reúnen el último viernes de cada mes en Casa Inju (Instituto Nacional de la Juventud). En los encuentros se juntan entre 30 y 40 personas, aunque el grupo de Facebook lo conforman unas 3 mil. El lugar lo consiguieron porque el Inju hace un llamado semestral para emprendimientos juveniles, que el club viene renovando desde hace cinco años.
Acerca de cómo consiguen los libros, Joanna cuenta que en algunas librerías les hacen descuentos y, muchas veces, se los prestan entre ellos. Cada mes se elije uno distinto a través de una votación en el grupo de Facebook.
Una jornada particular
Este año Librofest reunió diversos talleres interactivos. Entre ellos, uno de lectura performática, uno sobre ciencia ficción y actualidad y otro de Máster Rol. Además, había áreas de lectura, juegos relacionados con lo literario -el trivia ya es un clásico- y una zona en la que se daba orientación profesional relacionada con el campo de la literatura. El cierre estuvo a cargo de la banda “Legionarios” que se formó dentro del club. Ellos acompañaron musicalmente lo que iban leyendo los integrantes de la Red de Jóvenes Escritores del Uruguay.
“La clave era la interacción y hacer cosas diferentes a los años anteriores”, expresó Joanna. La agenda del evento se creó de manera colectiva. Una vez que tuvieron la idea de aquello que querían realizar, se comunicaron con las personas que podían ayudar. Quienes decidieron acercarse, trabajaron de forma honoraria porque tienen una relación cercana con el club. A su vez, muchos autores uruguayos que pasaron por este espacio, son también periodistas, por lo que contribuyeron con la difusión, pero “sin dudas”, aclaró, “los mayores difusores son los miembros, que replican en sus redes y su entorno el trabajo que hacen”. El alcance fue positivo, pues en esta edición aumentó la cantidad de asistentes, que había sido de unos 200 en las dos anteriores.
Dada la gran convocatoria que tuvieron, en particular, los talleres, muchos plantean la idea de desarrollar la convención en dos días, con el fin de tener más propuestas. “Estamos muy contentos con los mensajes que nos llegaron, si hay un interés por parte de la gente, podemos seguir realizando eventos para la comunidad lectora”, afirmó Joanna.
Tanto Luna como Angelina era la primera vez que asistían a la Librofest y se enteraron de la actividad a través de un tweet que les envió un amigo. Por su parte, Nicolás es miembro del club desde sus comienzos y participó de las ediciones previas. Los tres jóvenes coincidieron en que lo más lindo de la convención es el intercambio entre lectores. Asimismo, Nicolás sostuvo que lo interesante de asistir al club es “ver la forma en que cada uno interpreta un libro, ya que todos tienen visiones diferentes”. Jessica, que también integra este ámbito, aseguró que lo que más le gusta es la gente y el hecho de compartir. Sus opiniones parecen dar sentido a la aspiración de Joanna que pretende “derribar el mito de que los jóvenes no leen”.
