“Las cosas suceden. Lo único que puede hacer un periodista al respecto no es poco: ejercer ciertas facetas del derecho de la sociedad al libre acceso a la información a partir de la “producción” de parte de “la realidad” que ella consume, esa parte denominada con vaguedad como “lo público”, decía Marcelo Jelen, periodista uruguayo fallecido en 2014, que fue columnista en La Diaria, y que hoy el Premio Nacional de Prensa Escrita lleva su nombre. Jelen usó esa definición al escribir una síntesis de su libro Traficantes de realidad en el sitio saladeprensa.org.
En la actualidad, La Diaria, la Universidad de la República y la Coordinadora de Psicólogos del Uruguay enfrentan un juicio por 451 mil dólares, en el que son acusados de daño moral y lucro cesante. Los demandantes son Gabriela Bazzano, psicóloga y ex secretaria nacional de Cuidados y Discapacidad del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), y su esposo, Joaquín Rodríguez, quien también es psicólogo. El casi medio millón de dólares solicitado en la demanda se fundamenta en que Bazzano se vio obligada a renunciar a su cargo en el Mides después que La Diaria publicara una investigación periodística realizada por Cecilia Álvarez en 2020.
La investigación, que ganó el premio Marcelo Jelen 2021, expone que la asociación civil Seamos, dirigida por Bazzano, entregaba hijos de personas con discapacidad intelectual a familias que pudieran asumir el cuidado a través de un programa de “familias articuladas”. Los datos recopilados por la periodista también muestran denuncias contra Seamos por malos tratos, omisión de asistencia, abandono y apropiación de dinero de las pensiones de los usuarios.
Sin embargo, según la explicación de Bazzano para un informe de Uruguay Crece Contigo, este programa “pretende salvaguardar el vínculo entre los niños y sus madres biológicas apoyándolas en el maternaje”, y que estas familias, que se hacen cargo de los niños, los lleven de “visita semanalmente al hogar para favorecer el cuidado de los niños”. Pero esto, según la investigación periodística, esto no sucedía así. Incluso, algunas de las “familias articuladas” cuestionaron la legalidad del programa.
En una entrevista con la Radio Universal, Bazzano dijo que lo expuesto en la nota de La Diaria y una posterior declaración de la Coordinadora de Psicólogos “tocan” su “prestigio profesional”, y que “de alguna manera buscan invisibilizar todos los actores del Estado que tuvieron que ver con el programa vanguardista que se instaló en el país”.
Agregó que “nunca jamás” hubo niños entregados ni bebés vendidos”. Sostuvo también que el proceso que se muestra en la nota es “desgarrador” y que, desde su mirada como psicóloga, los datos presentados inciden en la opinión pública y en la opinión de los psicólogos.
La mirada de quienes escriben
Los datos recopilados por la periodista Cecilia Álvarez se basan en información de una investigación de la Interpol y la Fiscalía de Crimen Organizado sobre Seamos. La investigación periodística también cuenta con entrevistas sobre lo ocurrido. Sin embargo, Bazzano califica lo expuesto en el artículo como “hechos difamatorios”.
Desde 2011 en Uruguay existe la real malicia. Esto quiere decir que la persona que demanda a un periodista tiene que probar que la publicación actuó en conocimiento de que estaba publicando algo falso, y que tenía intención de dañar a la persona que fue objeto de la investigación, pero esto no se dio así.
Según La Diaria, para el proceso de investigación de la nota, la periodista intentó ponerse en contacto con Bazzano para que dé su versión de los hechos, pero esta nunca hizo declaraciones. En la última audiencia del juicio no se presentaron pruebas que probaran la real malicia, sino que los demandantes enfatizaron en la mala imagen pública que la nota le deja a Seamos y a la propia Bazzano.
En diálogo con Sala de Redacción, Fabián Werner, presidente del Centro de Archivos y Acceso a la Información (Cainfo) y periodista, dijo que esta publicación es sobre “hechos verdaderos que sucedieron” y que, además, los hechos expuestos fueron publicados por otros medios; en el caso de Bazzano, fue objeto de una investigación judicial. “Las investigaciones periodísticas no tienen la obligación de probar la culpabilidad, sino de informar sobre temas de interés público”, agrega Werner.
Esta investigación ganó el Premio Nacional de Prensa Escrita Marcelo Jelen en 2021. El premio busca contribuir a la difusión y el “contagio de las buenas prácticas” que promueve el Código de Ética de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU), y también a “estimular a los y las periodistas con el ejemplo de la escritura y la ética de quien fuera un gran abrazador de causas”.
Fabián Cardozo, presidente de APU, expresó a Sala de Redacción que lo que han recibido como preocupación desde La Diaria es la “continuidad de la acción” y un “permanente hostigamiento económico de la demandante”. Este juicio, según Cardozo, busca “amedrentar” con una sanción económica el trabajo independiente de un medio de comunicación.
En ello coincidió Werner, quien explicó que hay algo llamado pleito estratégico contra la participación pública, una tipología que se identificó primero en Estados Unidos y en el Reino Unido. Esta tipología describe el conjunto de medidas de amedrentamiento, por lo general dirigidas a periodistas, que a través de juicios penales o civiles por grandes sumas de dinero tratan de evitar que el periodismo ejerza los controles que le competen.
A pesar de esto, expresó que le parece “poco probable” que una demanda con las características de la de Bazzano pueda prosperar hoy en Uruguay, debido a los resguardos que tiene el ejercicio del periodismo desde hace muchos años. “De todas maneras, no deja de ser llamativo y tiene que ser un motivo de alarma”, agregó.
Prosperidad sí o no
Consultado sobre las consecuencias que podría traer a La Diaria perder en un juicio de estas caracerísticas, Werner reafirmó su posición de que no cree posible que un juicio así triunfe, pero advirtió que “si prospera una demanda por este monto, probablemente la consecuencia sería el cierre del medio”. “Es muy difícil que hoy en Uruguay un medio de comunicación pueda enfrentar una demanda de casi medio millón de dólares”, completó.
Cardozo consideró que “la herramienta del sindicato es clave” y que, si los trabajadores de los medios de comunicación se organizan y se encuentran en una estructura sindical, resultará “mucho más fácil” defenderse en colectivo que individualmente. Aparte de la herramienta del sindicato, consideró que “denunciar todo este tipo de situaciones” también como algo clave. “Cuando se trata de amedrentamiento hay que denunciarlo”, expresó.
A pesar de que, según Werner, es difícil que este juicio triunfe, explicó que el asesoramiento legal le implica mucho dinero al medio, y, por lo tanto, se genera un “perjuicio económico”. “Esos son recursos que podrían utilizar para hacer buen periodismo en lugar de estar defendiéndose de esas acusaciones”, planteó Werner.
Este año, Cainfo publicó su octavo informe sobre periodismo y libertad de expresión, que expone los principales hallazgos sobre el ejercicio de la profesión periodística en Uruguay. El relevamiento indica que se registraron “69 casos de amenazas o restricciones a la libertad de expresión de periodistas entre el 1 de abril de 2021 y el 31 de marzo de 2022”, lo que, según el documento, se traduce en un episodio de este tipo por semana, en promedio.
En el informe se registra un caso similar al de Bazzano. En junio de 2021, el ex edil colorado de Maldonado, Pablo Gallo, inició un juicio civil por daño moral y lucro cesante contra La Diaria, Canal 10, La República, Caras y Caretas, FM Gente y Radio Piriápolis. La razón de la demanda es la siguiente: estos medios difundieron que Gallo había sido enviado a prisión por estafa con terrenos en su departamento y el político reclamó una indemnización de 300 mil dólares. Al cierre del informe, Cainfo aclara que la causa continuaba su curso.
“Todos los juicios que se plantean contra medios y periodistas por publicaciones de este tipo tienen como consecuencia una restricción a la libertad de expresión”, concluyó Werner.