Después de su pasaje por la Cámara de Senadores, el proyecto de Ley de Urgente Consideración (LUC) salió con mínimas modificaciones en el capítulo que dispone la creación de un Instituto de Bienestar Animal, respecto al articulado remitido originalmente por el Poder Ejecutivo. En concreto, se agregó al consejo directivo un representante de la Sociedad de Medicina Veterinaria del Uruguay (SMVU), que se suma a los del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis, el Ministerio del Interior, el Congreso de Intendentes, la Facultad de Veterinaria, de agremiaciones de productores rurales y protectoras de animales.
En el artículo 377, el proyecto de LUC establece que todo tenedor de animales deberá mantenerlos en condiciones físicas y sanitarias adecuadas, lo que implica proporcionarle alojamiento, alimento y abrigo adecuados para la especie, de acuerdo con lo establecido por la Organización Mundial de Sanidad Animal y las reglas de la Sociedad Mundial para la Protección de los animales. Además, no podrán abandonarlos y dejarlos sueltos en lugares públicos de libre acceso, excepto en los autorizados para ese fin, y deberán tener “responsabilidad sanitaria” a la hora del paseo, cumplir con la castración e identificación, entre otras.
Una disposición trascendente es que los daños que puedan ocasionar los animales a otros animales o personas deberán ser reparados por sus dueños. Asimismo, se contempla realizar y fomentar la investigación y estudios relacionados a la situación de los animales de compañía y de producción, su comportamiento y su producción, incluyendo a los de la fauna silvestre. Además, la LUC plantea la creación de un registro de prestadores de servicios para los animales y también ampliar los registros existentes. A su vez, el proyecto de ley dice que todo animal deberá ser castrado para prevenir y limitar su reproducción, método al que define como el único “ético y eficiente”.
En la cancha
Margarita De Miquelerena, presidenta de la SMVU, dijo a Sala de Redacción que está de acuerdo con el contenido de la LUC respecto al bienestar animal, pero consideró que a la hora de llevarla a la práctica se verá cómo funciona. “Esto dependerá del presupuesto que se le otorgue por parte del gobierno”, agregó De Miquelerena, cuya organización integrará el directorio del instituto que crea la ley.
Por su parte, destacó que si bien se habla de protección animal desde 1995 a nivel mundial, actualmente se dio un cambio de conducta en relación a los animales de compañía, a los que muchas veces se los utiliza como objeto de moda y no se presta mucha atención a sus necesidades en tanto seres vivos. En particular, según indicó la veterinaria, los dueños no prestan atención al lugar donde los animales viven y si ese es el hábitat ideal para su desarrollo. Según agregó, es por ello que se planteó como problema la superpoblación de animales de compañía, ya que, por ejemplo, se estima que en Uruguay hay un millón de perros, “que en comparación a la cantidad de habitantes es desmesurado”.
Para concientizar a la población sobre el cuidado y protección animal, De Miquelerena consideró que se debe hacer un trabajo a nivel de la educación masiva escolar y de la población en general. Al respecto, agregó que también a nivel gubernamental es importante el rol que puedan jugar las intendencias departamentales.
