Camila Simoes tiene 24 años y es de Salto. Cuando terminó el liceo tenía bastante claro que lo que quería estudiar estaba relacionado con la biología y con temas de la tecnología y otras áreas como la química, matemática y física. Averiguó la oferta de carreras y encontró algo cercano a lo que le gustaba: comenzó a estudiar Bioquímica Clínica en la Facultad de Química, pero no la convencía mucho. En 2013 se enteró de que al año siguiente comenzaría a dictarse la Licenciatura en Ingeniería Biológica en el Centro Universitario Litoral Norte (Cenur Litoral Norte) de la Universidad de la República (Udelar) y que los dos primeros años los podía cursar en Salto. Decidió comenzarla.
En diálogo con Sala de Redacción, contó que no tuvo que esperar “hasta años avanzados para saber de qué realmente se trataba la carrera” porque “en el primer año hay materias que son a un nivel muy alto y podés ver más o menos qué tipos de cosas podés hacer”.
En carrera
La Licenciatura en Ingeniería Biológica es una carrera que comenzó a dictarse en 2014; la primera generación tuvo 14 estudiantes durante el primer año pero, por diferentes motivos, no todos siguieron. Actualmente, los dos primeros años se pueden cursar en la Facultad de Ingeniería en Montevideo y en las sedes de Salto y Paysandú del Cenur Litoral Norte; los últimos dos años sólo se dictan en Paysandú. Al ser una carrera nueva, que recién está generando egresados “no había ejemplos para ver en qué lugares se podía insertar una persona que estudia esto” comentó Simoes. La licenciatura tiene tres áreas de especialización: industria hospitalaria; ingeniería biomédica o ingeniería clínica; e investigación.
Simoes está trabajando en el área académica para el grupo de Ingeniería Biológica que se dicta en Paysandú; tiene un cargo docente y realiza tareas de gestión e investigación. “Generalmente los de investigación están muy asociadas al área de especialización que yo elegí , el área de bioinformática”, explicó.
Tesis de grado
El 28 de junio Simoes defendió en Paysandú su tesis de grado, titulada “Sistema de cálculo de probabilidad de enfermedades raras en la descendencia a partir de datos genómicos”. La defensa se transmitió en videoconferencia en Salto y Montevideo.
La licenciada diseñó una herramienta de software pensada para que “arroje ciertas estadísticas partiendo de datos de genomas de un individuo y calcule la probabilidad de que sus hijos sean afectados por una enfermedad rara según 26 poblaciones mundiales” detalló Simoes. Considera “enfermedades raras” a las enfermedades de baja frecuencia en la población y que no se conoce la causa, no hay tratamientos o hay poca investigación en el área. “La idea es aportar por ese lado”, concluyó.