Desde el 6 hasta el 21 de mayo, Israel y Palestina se vieron envueltos en otro de sus tantos conflictos a lo largo de la historia. Se trata de otro capítulo dentro de una confrontación que lleva largos años, generada por disputas políticas, territoriales y económicas, en un enfrentamiento que no parece tener un fin claro.
En conversación con Sala de Redacción, el politólogo Diego Hernández Nilson afirmó que si bien los conflictos en general son multidimensionales, en este caso predomina una dimensión política del enfrentamiento. “Es un conflicto entre dos entidades internacionales y diferentes, para evitar una discusión sobre el Estado palestino, que todavía no tiene un Estado absoluto”.
Además, agregó que si bien Israel es un país donde predomina la religión judía, hay multiplicidad de religiones. Por otro lado, si bien la franja de Gaza es bastante pequeña y en ese territorio históricamente predomina la religión musulmana, “tampoco es necesariamente un Estado que adhiera a una religión particular”, sostuvo el politólogo.
En conversación con este medio, el presidente del Comité Central Israelita, Marcos Israel, expresó que el conflicto es político y religioso. “El Islam tiene una connotación política muy grande, apenas se funda en el siglo VII, inmediatamente y en poquísimos años conquistaron desde el Atlántico hasta la India. A los judíos se les permitía vivir si se volvían súbditos”, manifestó Israel.
El conflicto de Gaza
Hernández Nilson afirmó que, desde que terminó el domino colonial británico, la franja de Gaza está en disputa entre distintos proyectos políticos del mundo musulmán, por lo que siempre tuvo dificultades para ser independiente. Es un territorio ocupado por Israel, que mantiene el control sobre las fronteras y el mar territorial, más allá de que, a partir de acuerdos de paz celebrados en las últimas décadas, tiene una administración palestina.
El politólogo aseguró que lo que está ocurriendo ahora es lo mismo que ha pasado en los últimos años: conflictos entre las poblaciones civiles de Israel y Palestina, y entre el ejército israelí y las milicias palestinas vinculadas a movimientos políticos. Según agregó, esa dinámica se favorece por prácticas como actividades terroristas o distintas amenazas de parte de las milicias palestinas. “Del lado de Israel, lo que tenemos es una práctica de colonización del territorio, que muchas veces no respeta los acuerdos de paz e implica una perforación constante del reparto de territorios. También existe como un ‘apartheid’ por parte de Israel, por el que las poblaciones palestinas que viven en territorio israelí no tienen los mismos derechos y sufren distintos tipos de discriminación sistemática, particularmente del Estado y del ejército”, declaró.
Por su parte, Israel aseguró que la historia de Gaza se remonta al primero de los reinos de Israel, entre 1200 y 1300 A.C., y que por años Gaza se llamó Judea Samaria. Además, mencionó que varios imperios pretendieron conquistarla, entre ellos los asirios, los babilonios, los persas, los griegos y los romanos. “Los judíos se levantaron varias veces contra esos imperios. El ultimo de esos levantamientos, y de los más largos, fue cuando los romanos destruyeron toda Jerusalén, echaron a la mayoría de los judíos, pero le cambiaron el nombre y le pusieron Palestina. Al mismo tiempo que Jerusalén generó los reinos judíos, hubo un pueblo en esa zona de Gaza que se llamaban ‘Filisteos’, estos eran sobrevivientes de la civilización minoica”, afirmó.
¿Qué es Hamás, y quiénes son los afectados del conflicto?
Hernández Nilson, explicó que Hamás es un movimiento político que está vinculado a milicias terroristas. Por otro lado, el presidente del Comité Central Israelita afirmó que Hamás “es una rama de los hermanos musulmanes y su misión es matar a todos los judíos e imponer su visión radical del islam”. Además, agregó que su carta fundacional es “antisemita, totalitaria e imperialista”.
El politólogo señaló que actualmente Hamás tiene el control total de la franja de Gaza. Según explicó, está en Palestina desde hace varios años, que “siempre se disputa entre Hamás, que es un partido islámico, nacionalista y yihadista, y Fatah, el partido tradicional palestino. En los últimos años ha predominado el Fatah en Jordania y Hamás tiende a predominar en la franja de Gaza, si bien el gobierno es de la administración palestina”, expresó.
Hernández Nilson destacó que los civiles siempre son afectados en cualquier conflicto bélico, ya que las prácticas terroristas muchas veces apuntan hacia ellos, mucho más claramente del lado de los palestinos. El politólogo declaró que “el hecho de que Palestina no cuente con un ejército y tengan fuerzas especiales muy limitadas hace que del lado palestino las milicias asociadas a la lucha contra Israel sean generalmente civiles”.
Finalmente, los dos entrevistados ven complicada una salida, que, según el politólogo, “es muy difícil [porque] son conflictos de muy largo aliento que involucran intereses muy fuertes. Existe el juego a dos niveles, por un lado, el conflicto internacional entre países, Estados y entidades internacionales y, por el otro, hay conflictos en la política doméstica e interna, tanto en Israel como en Palestina. Eso dificulta, porque para salir favorecido en la política interna muchas veces se actúa internacionalmente”, concluyó Hernández Nilson.
Por otro lado, Israel opinó que “la solución debió haber sido que la población árabe quedara bajo la soberanía jordana, ya que Jordania es un país palestino, que Gaza hubiese quedado bajo la soberanía de Egipto. Hoy ya no sé si eso es viable, pero entiendo que habrá que tratar de reflotarlo”, finalizó.