Radio, televisión, prensa escrita o un sinfín de nuevos medios digitales. Cada persona es un mundo y este mundo elige con qué medios informarse y a qué periodistas brindarle o quitarle su confianza. El periodista, a su manera y dentro de sus posibilidades, también elige el tipo de medio donde prefiere desempeñar su labor. Es el caso de Lucía Cuberos, periodista del semanario Búsqueda, quien anteriormente trabajó en la radio El Espectador, el portal Ecos, la Agence France-Presse, el medio internacional China Dialogue y hasta en el área de comunicación institucional de un banco privado. Sin renegar de sus anteriores trabajos, la periodista destaca de su actual empleo la posibilidad de presentar un periodismo “más analítico” al de otros medios, ya que, por su frecuencia semanal, Búsqueda no se rige tanto por la inmediatez y sí por la calidad y la investigación. Trabajar allí “siempre fue un objetivo personal”, ya que entiende que, de los medios escritos del país, “es de los más independientes y objetivos”.
En un semanario que marca muchas veces la agenda periodística, Cuberos ha sabido hacerse un lugar desde hace ya más de seis años, y hoy se dedica a cubrir noticias relacionadas con los gobiernos departamentales y los temas ambientales, tópicos que le “apasionan”. El primero porque abarca temas muy amplios, y es como cubrir a un “mini país”, con sus normas y tradiciones; el segundo, en el que más se ha especializado en los últimos años, porque lo considera esencial y transversal a muchas otras áreas, ya que “todo, hasta las decisiones políticas, está relacionado con temas ambientales”.
Descomplejizar lo complejo
Cuberos analiza el rol de los periodistas y entiende que lo que debe tener un buen profesional a la hora de presentar una noticia o un informe es la capacidad para explicar con palabras fáciles y entendibles un tema más complejo. Bajar esa información del pedestal de términos académicos o científicos, para que el lector promedio pueda leer y comprender sin dificultades. Para ella, se trata de hacer el trabajo que el que lee no quiere hacer: consultar tantas fuentes como sean necesarias para entender con claridad el tema.
Por otro lado, Cuberos piensa que un buen texto periodístico debe contar con buena redacción y jerarquización de la información, así como con un correcto uso de la puntuación y la conjugación verbal. Pero no es lo único que se debería tener en cuenta. Con la elevada oferta de medios en la actualidad, la periodista entiende que la nota debe atraer al lector desde el primer momento, con un título llamativo que invite a leerla y párrafos introductorios que enganchen a la audiencia.
A su vez, otros elementos importantes de un buen texto periodístico son la extensión y la cercanía del tópico, porque “hoy ya no pueden ser textos muy largos”, salvo excepciones en los que el tema realmente lo amerite. Tampoco puede tratarse de algo muy lejano, que no tenga contacto ninguno con el público. Cuberos explica que, en Búsqueda, siempre intentan darle una “pata local” o un punto de contacto con nuestro país a noticias internacionales que podrían no ser de interés para el grueso de la población local.
“Siempre cuestionar”
Para la periodista, es fundamental ser curioso: la característica de querer averiguar todo al detalle y por qué pasan las cosas es una condición esencial del buen periodista. A su vez, entiende que a esta curiosidad se le debe sumar un “olfato periodístico” que permita “no comprar la información de primera sino cuestionar, siempre cuestionar”, y tratar de ir más allá de la fuente consultada para obtener la máxima información posible sobre un tema. Una vez obtenida esa información, basta con plasmarla de manera coherente y entendible para que cada lector genere “su propia opinión al respecto”.
Cuberos destaca, a su vez, que un buen periodista debe estar familiarizado con las fuentes escritas y aprender a leer e interpretar algunas que tienen cierto grado de complejidad. Muchas veces las redacciones de comunicados oficiales, resoluciones, decretos presidenciales y versiones taquigráficas de las sesiones del Parlamento o de las juntas departamentales “no son redacciones sencillas, o no es la redacción a la que una está acostumbrada en el día a día”. De esta manera, se vuelve necesario aprender a leer este tipo de textos, que son la base para recabar datos e información. Cuberos expresa que, con la práctica, se logra leerlos sin reparar tanto en los detalles y encontrar lo que se está buscando.
La “nueva normalidad”
En relación a la importancia del periodismo en la actualidad, Cuberos entiende que se mantiene “igual de relevante que siempre”. Lo que sí se ha modificado es la forma de hacer periodismo. Por ello, la periodista cree que si los medios tradicionales no logran adaptarse a esta nueva normalidad “comenzarán a desaparecer”. En ese sentido, sostiene que los medios deben afrontar el desafío de reposicionarse, manteniendo la credibilidad como bandera, pero Cuberos reconoce que gran parte de la población ha perdido la confianza en los periodistas y en los medios tradicionales, lo que los lleva a optar por informarse a través de las redes sociales. Sin embargo, considera que esto es un error, porque “no son un medio de prensa y allí no hay información chequeada”, lo que lleva a que las personas terminen creyendo “algo que no es verdad, que no pasó”.
Sobre la calidad del periodismo en la actualidad, Cuberos opina que “se puede haber deteriorado un poco porque los medios están contaminados por un montón de intereses”. La periodista entiende que quien ejerce la profesión debe “mantener la independencia y no abandonar los principios” para no atentar contra su propia credibilidad. Por eso, es fundamental “que no te bajen una línea ni te digan de qué escribir y de qué no”.
Emiliano Santucho
Esta serie, titulada “Detrás de las noticias”, reúne entrevistas a cuatro periodistas uruguayos. El objetivo es presentar a los lectores interesados en el quehacer periodístico los valores y prácticas que guían su labor cotidiana en medios escritos. El trabajo deriva del proyecto de investigación “¿Cómo leen los periodistas?”, financiado por la CSIC, y los textos que se incluyen fueron elaborado por los tutores de Sala de Redacción Rosina Arcos, Kassandra Carbonari, Sofía Dri, Lucía Pereira, Emiliano Santucho y Lucía Silveira, con la orientación de las profesoras Betania Núñez y Amanda Muñoz de la Sección Académica Periodismo y Damián Díaz de la Sección Académica Lenguas y Estudios sobre el Lenguaje.