La asamblea de socios del Club Social Miramar Misiones resolvió el lunes 3 reafirmar democráticamente la decisión del presidente del club, Edgardo Del Forno, de no jugar en la C a nivel profesional. La deuda que tiene el club es de 250.000 dólares y el hecho de no poder pagarse les impide a “los monos” jugar el campeonato. La asamblea priorizó destinar el dinero existente a las formativas para, en un futuro, tratar de llevar a “los cebritas” a jugar en divisiones más altas, como estaban acostumbrados en otras épocas. De todos modos, la intención del club es presentarse al campeonato de 2020, según declaró Del Forno a Sala de Redacción.
A corto plazo la idea de Miramar es volverse Sociedad Anónima Deportiva y conseguir un gerenciamiento del exterior. Según el presidente, esa es la vía a la cual se dirige el fútbol uruguayo y la única forma de subsistir actualmente. En este momento en el fútbol uruguayo “un club por las suyas no puede existir”, explicó. Del Forno entiende que ser un club de barrio y tener un nivel de profesionalismo se contraponen en este momento. Agregó que en pocos años todos los clubes se conformarán en Sociedades Anónimas Deportivas, para poder sobrevivir con el aporte de capitales extranjeros; como claro ejemplo de la situación, señaló el buen pasar de Torque.
Del Forno recordó que Miramar fue “cuna” de jugadores como Álvaro Palito Pereira, Sebastián Fernández, Pablo Granoche, entre otros. También pasaron por la institución Ojota Morales, Walter Pandiani, y Washington Tai. Frente a la pregunta de buscar apoyo de estos jugadores, Del Forno contestó que “vendría muy bien el apoyo” pero que acotó que, al margen de eso, debían buscarse todas las alternativas posibles para devolver el club a lo que se merece.
