Para reducir la cantidad de personas que circulan en el escenario y evitar posibles contagios de covid-19 en el próximo concurso de carnaval, la Asamblea de Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay (DAECPU) apoyó la propuesta de incorporar pantallas gigantes para proyectar imágenes, en sustitución de las escenografías tradicionales. La empresa proveedora del servicio, la televisión y diseñadores gráficos son los actores que de forma conjunta llevarán adelante el proyecto.

“Obviamente la tecnología vino para quedarse, pero también hay que pensar en las personas que se quedan sin trabajo”, comentó a Sala de Redacción (SdR) la escenógrafa y vestuarista Eva Gómez, y aclaró que al no haber grandes escenografías para hacer, “el presupuesto baja mucho”. 

Lo mismo piensa el escenógrafo Jórge Pérez, quien explicó que la medida “va a afectar a un montón de gente”. Agregó que los escenógrafos “quizá” puedan elaborar algunos elementos para contribuir al espectáculo, pero el equipo de 10 personas como mínimo que se encargaba de armar y desarmar las escenografías “se está quedando sin trabajo”. Pérez contó que en su caso ya venía trabajando para algunos espectáculos del carnaval 2022; sin embargo, ahora está evaluando si logra “colocar algo de todo lo que se había diagramado”. “Esa es la parte negativa”, afirmó: “quedar con las manos vacías”. 

Por el contrario, Agustín Camacho, trabajador del área de vestuario, puesta en escena y textos, dijo que “si bien todos los escenógrafos piensan que se van a quedar sin trabajo”, cree que ellos “tienen el desafío de reinventarse” y “tendrán que trabajar de otra manera”: desde un lugar más “detallista” y a través de la creación de utilería “más resistente” y elementos que puedan utilizarse como desniveles para un mejor desarrollo del espectáculo. Camacho sostuvo que no es “quitar”, sino que es “dar trabajo”, ya que se van a necesitar técnicos para el manejo de las pantallas. 

Según explica el comunicado de DAECPU publicado el 18 de setiembre, se prevé que la medida aplique para las cinco categorías participantes: agrupaciones de negros y lubolos o comparsas, murgas, humoristas, revista y parodistas. Todos tendrán la posibilidad de utilizar en cada momento del espectáculo tres imágenes fijas y una animada. Para su elaboración, habrá a disposición siete especialistas en diseño de imágenes. Además del servicio de pantallas, los conjuntos podrán hacer uso de elementos de utilería en sus presentaciones.

“Si se sabe aprovechar, la pantalla abre posibilidades en cuanto a lo que puede ser la narración de un espectáculo”, afirmó Camacho a SdR. Consideró que algunos elementos cinematográficos “pueden jugar muy interesantemente en los planteos escénicos de cualquier conjunto”. El único factor que interpretó como negativo es la posibilidad de que ocurran fallas técnicas, aunque entiende que lo mismo puede suceder con la escenografía habitual.

Por otra parte, Pérez cree que “cada conjunto tiene su identidad”, de manera que al contar una historia, no es lo mismo que hayan pantallas planas a que estén las escenografías, porque se “pierde volumen”. Si bien está de acuerdo con el fin de la medida, explicó que de esta forma se eliminan posibilidades de que los integrantes de los conjuntos puedan realizar acciones en distintos niveles, al “colgarse o subir una escalera”, por ejemplo. En la misma línea se manifestó Gómez: “puede que la tecnología sume mucho”, pero a la vez “le quita identidad a cada conjunto”.

No es un reemplazo

Camacho cree que las pantallas digitales no van a suplantar a la escenografía tradicional, sino que estarán para “sumar”, ya que son herramientas que “tienen que ir de la mano”, y consideró que esta participación de la tecnología va a potenciar en gran medida lo que el espectador recibirá desde el escenario. Además, valoró positivamente la medida para que el carnaval tenga la posibilidad de “popularizar” de alguna forma la tecnología. “El arte cambia porque cambia el espectador y los creadores. No creo que sea suplantar un rubro, sino sumar uno nuevo”, concluyó Camacho.

Pérez tampoco piensa que se trate de un reemplazo, pero por otro motivo: aseguró que hay directores que se adaptan a la medida “porque no hay otra”, y agregó que referentes de algunos conjuntos de carnaval le han comentado que no están de acuerdo con la solución y que prefieren mantener la escenografía convencional. “Esto es una alternativa, pero nada más que una alternativa”, aseveró, y sostuvo que “más de una vez” se ha comparado a los espectáculos de carnaval con obras de primer nivel en otros lugares del mundo. “No estaba tan errado lo que se venía haciendo”, concluyó Pérez.

Camacho afirmó que “uno no tiene que ser necio y tiene que estar abierto a los cambios”, y comparó la situación con otro tipo de espectáculos de diversas partes del mundo donde se han implementado las pantallas como soporte escenográfico. En Uruguay, el programa “Got Talent” emitido por Canal 10 también hizo uso de pantallas como puesta en escena, y sobre esto, Pérez opinó que le pareció “excelente”, pero para ese tipo de presentaciones, “no para carnaval”. 

FacebookTwitter