Cada vez más personas ofrecen entretenimiento mediante las redes sociales y una temática en particular se convirtió en un fenómeno muy consumido durante la pandemia de covid-19: el ASMR. Este término es la sigla en inglés de Autonomous Sensory Meridian Response, traducido al español como respuesta sensorial meridiana autónoma, cuya principal función es lograr relajación y calidez mediante la percepción de quien observa o escucha un determinado contenido. De esa forma, a través de estímulos auditivos y visuales se puede generar una percepción que causa placer, materializado fundamentalmente en un hormigueo en la espalda, cuello y cabeza. Sin embargo, no todas las personas consiguen este efecto e incluso a muchas les puede causar malestar o incomodidad.

Existen muchas formas de ASMR: videos en los que se mastica comida, alguien aprieta objetos o habla en susurros, se acarician distintas superficies, se reproducen sonidos de chasquido de dedos, o se realizan juegos de rol, como cortes de pelo en barberías o visitas al doctor. En este último caso, por ejemplo, los autores utilizan los instrumentos de un doctor y colocan una pantalla verde con la que simulan un consultorio médico para que se vea más realista. 

Algunos youtubers se han hecho muy reconocidos en la plataforma, con canales que registran millones de suscriptores y cada vez son más los que se animan a aportar este tipo de videos en la comunidad. En Latinoamérica, muchos creadores de contenido han crecido con el pasar de los meses desde el inicio de la pandemia, incluso varios lograron alcanzar o superar los 500 mil seguidores.

En marcha

La venezolana María Andreina Ruiz es creadora de contenido ASMR en YouTube y conversó con Sala de Redacción para explicar, entre otras cosas, qué la motivó a realizar este tipo de videos: “Siempre me ha gustado ver ASMR. Me ayudó mucho en tiempos de ansiedad para lograr relajarme, hasta que luego se convirtió en un entretenimiento. Se me ocurrió la idea de aportar mi contenido con el fin de ampliar las elecciones del público”. Su canal, denominado MariAndreina ASMR, registra más de 70.000 suscriptores y se encuentra en constante crecimiento. “Jamás pensé en llegar a una cantidad como esta. Me enorgullece que muchas personas se sientan bien al observar mis grabaciones, me inspira a seguir por este camino”, expresó Ruiz.

La youtuber contó que “son videos muy personales, en los que se intenta transmitir la confianza y seguridad entre quien realiza este contenido y quien lo aprecia”. Los ASMRtist, como se conoce a quienes realizan este tipo de contenidos, producen los videos cerca de la cámara y con un fondo relajante para lograr mayor satisfacción visual. “Siento que es muy beneficioso para muchas personas, si bien hay algunas que no lo comprenden. De todos modos, creo que 90% capta el ASMR ya que hay muchísimos tipos, temáticas, ideas creativas que activan la reacción sensorial de la gente”, opinó.

Su video con más visitas se registró hace seis meses con más de 906.000 visualizaciones, dura 37 minutos y se titula “ASMR en Español – Barbería y Spa roleplay”. “Procuro grabar en los momentos del día donde hay más silencio, por ejemplo en la noche, así evito los ruidos de fondo del tránsito, mascotas o vecinos”, explicó sobre el ambiente ideal para filmar. 

Ruiz experimentaba en el rubro desde hacía mucho tiempo, solo que “no sabía que existía un nombre específico”. “Cuando me peinaba el cabello, cuando jugábamos a que nos dibujaran algo en la espalda, o si escuchaba algunos sonidos en clase, eran todas sensaciones que me provocaban un cosquilleo”, comentó sobre la captación del sentido.

En contexto

Consultada sobre el impacto que genera el ASMR, la psicóloga Verónica Britos señaló que “es importante separar conceptos: en la disciplina de la psicología, la palabra ‘terapia’ deja efectos a largo plazo”, y descartó el vínculo del ASMR con la terapia psicológica. “Si se planifica un viaje para descansar o dejar atrás el estrés se disfrutará ese momento, se logrará desconectar la mente de lo cotidiano, pero a la vuelta volverán a aparecer todas esas razones que generaron la planificación del viaje. El ASMR actúa del mismo modo, por ende, estos videos no cumplen con un marco terapéutico, aunque sí como una técnica de relajación”, manifestó la psicóloga. Los trastornos del sueño, mayormente conocidos como insomnio, es una de las patologías más frecuentes en la población en general. Según datos otorgados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), 40% de las personas no logra conciliar el sueño dentro de un margen temporal. El ASMR actúa como herramienta para lograr un descanso profundo para quienes disfrutan ver este tipo de videos. “Los cuadros de insomnio están vinculados con la ansiedad. Las técnicas de relajación colaboran para desarrollar un descanso más efectivo. Depende de la persona y los episodios en los que esté en proceso, pero en muchos casos se tiene que acudir a un estudio médico. Es completamente normal y hoy en día muchos pacientes padecen este trastorno”, contó Britos.

La psicóloga planteó su punto de vista sobre el uso de teléfonos, computadoras o televisión antes del descanso: “Particularmente, siempre recomiendo que aquellas personas que padezcan insomnio no usen dispositivos electrónicos hasta dos horas antes de querer dormirse. El impacto de la luz azul de las pantallas retarda la secreción de las hormonas necesarias para provocar el sueño, especialmente de la melatonina”.

Los pioneros
Varios canales de YouTube de ASMR poseen millones de suscriptores. Durante la pandemia, sus números se dispararon llamativamente. A modo de ejemplo, hasta junio de 2020, Jane ASMR, uno de los canales más populares, contaba con 7,79 millones de seguidores y actualmente supera los 13 millones, casi el doble en comparación al año anterior. Además, supera la cifra de cuatro mil millones de visitas totales en sus videos. Por otro lado, Zach Choi ASMR es otro canal que incrementó notablemente la cantidad de seguidores en un año: de 8,56 millones en junio de 2020 a 12.4 millones en la actualidad, con una cantidad total de visualizaciones que sobrepasa las dos mil millones.
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