A poco más de dos años de que la ciudadanía fuera convocada a las urnas para expedirse sobre la reforma “Vivir sin miedo”, que no obtuvo los votos suficientes, el oficialismo volvió a colocar en el debate público el tema de los allanamientos nocturnos, que había incluido en el plebiscito de 2019. “Las propias unidades policiales demandan la posibilidad de tener esta herramienta”, expresó Luis Calabria, director general de Secretaría del Ministerio del Interior, en diálogo con Sala de Redacción.
La Constitución de la República, en su artículo 11, concibe al hogar como un “sagrado inviolable”; plantea que nadie puede entrar en él en horas de la noche sin “consentimiento de su jefe”, y que durante el día sólo se podrá hacer “mediante orden expresa de Juez competente”. Por eso, para habilitar los allanamientos nocturnos, se requiere una reforma constitucional.
La iniciativa de volver a plantearla busca dar respuesta al combate del narcotráfico. Según Calabria, “la realidad que existe hoy es que las bocas [de venta de drogas] utilizan la protección constitucional para ampararse y de esa manera hacer el negocio ilícito en horas de la noche”, algo que “dificulta de sobremanera la tarea policial”.
Mario Layera, ex director de la Policía Nacional, manifestó sus discrepancias a la prensa. En conversación con Sala de Redacción expresó que “siempre hemos señalado que la Policía no está preparada y que significa una inversión en presupuesto muy importante”. Sobre la tarea nocturna de las bocas de venta de drogas, Layera opinó que “la conducta criminal se adapta rápidamente” por lo que “el riesgo es tan alto que los beneficios van a ser mínimos”.
Layera planteó que, de ocurrir, el debate debe ser amplio y profundo, y “tendrían que participar todos los especialistas en el tema”. Entiende que quizás pueda haber excepciones en las que el allanamiento nocturno pueda darse: “si se dijera que aumentan los secuestros, copamientos con personas en las casas y la violencia doméstica, ahí se podría discutir si es necesario”, afirmó, pero acotó que “en cierta manera estos casos están contemplados actualmente”.
Con respecto a lo que Layera señaló sobre la potencial ausencia de garantías que podría implicar un allanamiento nocturno, Calabria respondió que “el policía uruguayo está a la par de los mejores policías del mundo”. A su vez, expresó que “hay que darle a la Policía los instrumentos y las herramientas adecuadas para que hagan la tarea, pero está absolutamente capacitada para hacer esa y todas las demás tareas”.
La intención del Poder Ejecutivo es presentar un proyecto de ley para habilitar los allanamientos nocturnos. En relación a cuándo lo presentarán, Calabria adelantó que “puede ser perfectamente este año”. Tal como lo establece el literal B del artículo 331 de la Constitución de la República, para que una iniciativa de este tipo sea aprobada, se necesita la aprobación de dos quintos de la Asamblea General. Si el Parlamento aprueba el proyecto, deberá ser sometido a plebiscito en las elecciones más inmediatas, que serán en 2024.