Felipe Schipiani, diputado del Partido Colorado, impulsó a principios de abril un proyecto de ley para que los responsables u organizadores de espectáculos públicos puedan impedir el ingreso de personas que no se hayan vacunado contra la covid-19. La iniciativa aún espera para ser tratada en la Comisión de Salud Pública y Asistencia Social de la Cámara de Diputados.
En diálogo con Sala de Redacción, Gonzalo Civila, diputado del Frente Amplio e integrante de la comisión, se manifestó en contra del proyecto y llamó a construir salidas “más democráticas” ya que entiende que ir por estos caminos es recorrer “una zona peligrosa”.
No fue el único parlamentario que se mostró en contra del proyecto. El diputado de Cabildo Abierto Rafael Menéndez dijo en sus redes sociales que se trata de una medida “populista”. Apuntó directamente a Schipani y señaló que “evidencia una ideología que se codea con el autoritarismo”. Concluyó su publicación con un llamado a “respetar a quien no piensa igual que uno”.
Consultado por Sala de Redacción, Schipiani expresó que “quienes critican este proyecto diciendo que atenta contra la libertad, han leído muy poco sobre lo que esta supone”. “El ejercicio de los derechos de las personas pueden ser limitados cuando empieza a perjudicar los derechos del prójimo”, agregó. Con respecto a lo dicho por Civila y Menéndez, sostuvo que “la ley en ningún momento impone a los organizadores la obligación de pedir la certificación, simplemente da la posibilidad de hacerlo” y que esto queda a criterio de ellos.
Con respecto a las posibles consecuencias que traería la ley ante la situación actual en que todavía hay gran parte de la población sin vacunarse, Schipani respondió que “las personas que por razones ajenas a su voluntad no pudieron vacunarse, no serán inhabilitadas a ingresar a los espectáculos”. Aclaró que en esa situación comprende “tanto a quienes por recomendación médica les sea imposible vacunarse, como a quienes todavía no han podido agendarse para darse la primera dosis”.
En relación a la postura que va a tomar el Frente Amplio con respecto a este tema, Civila apuntó que todavía falta un debate colectivo, pero adelantó que no considera aceptable “una restricción a espacios o actividades públicas en un contexto de vacuna no obligatoria”. Agregó que “pese a que la vacunación es muy importante y hay que promoverla, no nos parece que el camino sea un derecho de admisión que establezca una segregación de personas por no haberse vacunado”. Además, consideró que faltó una política más contundente en relación con la vacunación de parte del gobierno y que “el Estado no ha hecho todo lo que está a su alcance para hacer una campaña de sensibilización y de promoción”.
Schipani también reafirmó la importancia de vacunarse, dijo que es un “acto de responsabilidad social”. Adhirió que quienes deciden no vacunarse, asumen una actitud egoísta y ponen en riesgo la salud del prójimo y que “si se perjudica a otras personas, perfectamente se pueden establecer algunas limitaciones”. Por último, manifestó que lo que se busca con este proyecto es cuidar la salud de la población, fomentar la reactivación de un sector que se ha visto duramente golpeado durante la pandemia e insistió que la ley “no discrimina a nadie”.
