El plan de alimentación que se está llevando a cabo durante la semana de turismo fue anunciado la semana pasada conferencia de prensa por la directora del Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP), Irupé Buzzetti, y el presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Robert Silva. En la conferencia, Buzzetti destacó que hasta el 1 de abril se habían repartido 51.719 almuerzos por día en 720 escuelas y que “se pudo llegar a tener una comida balanceada a nivel país” gracias al programa de alimentación escolar, diseñado para dar de comer a los niños en situación de mayor vulnerabilidad.
El 16 y 17 de marzo, junto con la suspensión de las clases presenciales, se puso en marcha la inscripción de los beneficiarios. Para ello se organizaron colectivos docentes y también de padres, que son los encargados de recibir viandas. La directora del CEIP dijo que “la escuela es en cada comunidad el mojón más importante” y dio especial reconocimiento a maestros y profesores. A su vez, reconoció el trabajo de 520 maestros comunitarios que son los encargados de relevar a alumnos que no están inscriptos en el programa pero lo necesitan.
Si bien durante semana de turismo no se están otorgando las bandejas en las escuelas, se otorga a las familias inscriptas un apoyo económico o en tickets. Los niños que perciben Asignaciones Familiares están recibiendo $85 adicionales por día y los inscriptos en el programa que no perciben asignación reciben dinero en tickets de alimentación; en ambos casos el cobro está a cargo de sus padres.
Por su parte, Silva acotó que “hay un equipo que, de forma responsable y humana, está trabajando en este tema” y que lo importante en esta situación es dar soluciones a aquellos que están en mayor situación de vulnerabilidad.
La situación en Colonia Nicolich
Alejandra García, subdirectora de la escuela número 155 de Canelones, ubicada en Colonia Nicolich, informó a Sala de Redacción que allí el trabajo comenzó entre el lunes 15 y el martes 16 de marzo. El primer paso fue anotar a los niños en un formulario online, que posteriormente presentaron a las autoridades para llevar un relevamiento más rápido a nivel nacional. El 18 de marzo comenzó la entrega de viandas para lo que fue necesario organizar las guardias de los maestros.
La escuela pertenece a un contexto sociocultural desfavorable y asisten a ella 550 alumnos, de los cuales 300 estaban previamente anotados en el comedor. La subdirectora manifestó haberse sorprendido por la poca cantidad de niños que se anotaron en un principio al plan. Por este motivo, se encargaron de llamar a las familias para explicarles el funcionamiento del plan de alimentación de las próximas semanas y eso causó el ascenso a 153 inscriptos. Explicó que de momento no cuentan con lista de espera y aseguró que “en la mayoría de las escuelas de la zona sucedió lo mismo”.
Por otra parte, dijo que “la comunidad está muy agradecida por todo lo que la escuela está haciendo” y resaltó el hecho de que hay familias que reciben una sola bandeja por cada hijo, pero tienen más hermanos en el liceo que son ex alumnos de la escuela y no tienen recursos para alimentarse. También enfatizó que “hay familias que se han quedado sin trabajo de un día para el otro y nos piden ayuda o una bandeja si sobra”.
