En Uruguay, la participación de las mujeres en las directivas de clubes y en el periodismo deportivo ha ido creciendo a lo largo del tiempo; aún así, siguen conformando un porcentaje muy reducido dentro de estos ámbitos.
Los últimos datos presentados por la Secretaría Nacional del Deporte en 2021 indican que los hombres ocupan un 84,9% de los cargos directivos, con una diferencia que se observa en mayor medida dentro del fútbol en comparación al resto de los deportes.
Virginia Ithurbide, periodista en 13 a 0, programa deportivo de DelSol FM, habló con Sala de Redacción sobre la situación de las mujeres en el ámbito deportivo: “El crecimiento, si bien se da y hay que celebrarlo, también falta, y por eso pienso que tenemos que empezar a juntarnos, a pensar que hasta acá llegamos y plantearnos hacia dónde vamos”.
Actualmente, se encuentran mujeres en puestos de mayor relevancia dentro de las directivas. Tras las últimas elecciones del Club Nacional de Fútbol (CNdeF), su directiva quedó conformada, entre 14 integrantes, por una mujer, Tatiana Villaverde, quien está en la contaduría del club. También dentro del equipo femenino del CNdeF se encuentra la coordinadora general del plantel, Florencia Stefany.
Ithurbide compartió su opinión sobre las mujeres en los roles directivos: “Yo creo que la primera que rompió con la barrera de poder estar dentro del Ejecutivo, que es como el grueso más puro y duro de la AUF [Asociación Uruguaya de Fútbol], es Andrea Lanfranco. Hubo una presidenta en Cerro, también en Rampla, hay mujeres dirigentes en los equipos en Nacional y en Peñarol. Es muy importante pensar que ha habido mujeres que han luchado un montón y han conseguido que los clubes tengan comisiones de género, que son sumamente importantes dentro de los clubes”, afirmó.
En otros deportes, como el básquetbol, las mujeres ocupan diversos roles detrás de quienes salen a la cancha. Florencia Somma, capitana del equipo femenino del Club Malvín, con el cual ganó 15 títulos, es actualmente preparadora física del equipo masculino de ese club.
Otro caso es el de Victoria Pereyra, quien llevó al equipo de Aguada al segundo puesto como entrenadora en la Liga Sudamericana de Básquetbol de 2024 y actualmente está en su segundo año dirigiendo al equipo. “En el mundo del básquetbol en Uruguay he tenido el privilegio de ser una de las primeras en contar con ciertas oportunidades, pero con ello también viene una gran responsabilidad. Mi mayor anhelo es que este sea solo el comienzo y que estas puertas que se están abriendo sean tan solo las primeras de muchas”, opinó sobre su trabajo en el club.
Sobre los desafíos que presentan las mujeres para acceder a roles, la entrenadora de las aguateras reflexionó que “muchas mujeres encuentran, en comparación a los hombres, su camino hacia la excelencia en el ámbito deportivo mucho más arduo, enfrentándose a barreras estructurales, prejuicios y falta de apoyo. Esta desigualdad se observa no únicamente en las posiciones de liderazgo o dirección, sino también en el acceso a recursos, formación y reconocimiento”.
Un desbalance de este tipo se da también dentro del periodismo deportivo, en el que la voz de las mujeres ha comenzado recientemente a recibir lugares de mayor protagonismo.
Pereyra hizo énfasis en las diferencias que coinciden entre ambos rubros: “En muchos casos, el público parece más dispuesto a escuchar y valorar las opiniones de mujeres cuando estas han logrado consolidar una trayectoria reconocida, como si su experiencia fuera el único aval para ser tomadas en serio”.
Por su parte, la periodista Ithurbide afirmó que “hay varones del público que te escuchan para ver si le errás, no por lo que vos estás diciendo de cómo jugó su plantel, su equipo, el domingo o el sábado, sino para ver qué burrada decís y poder mofarse, y ahí pasamos al acoso”. “Las masculinidades débiles, violentas, que creen que el deporte, sobre todo el fútbol, es un espacio puro y exclusivamente para hombres, descargan todas esas miserias sobre nosotras, fundamentalmente con ciertas violencias sexuales, mientras que a un varón solo lo putean”, concluyó.