A una semana de la segunda vuelta de las elecciones nacionales 2024, los candidatos del Frente Amplio (FA) y Partido Nacional (PN), Yamandú Orsi y Álvaro Delgado, protagonizaron el único debate presidencial obligatorio de la campaña electoral, tal como lo estipula la ley 19.827. Este encuentro, moderado por los periodistas Raúl Ponce de León y Pilar Teijeiro, se realizó en Estudio 9 y tuvo una duración de 90 minutos. El debate estuvo dividido en tres bloques y abarcó cinco ejes temáticos: desarrollo humano, en el que se trataron temas como vivienda, salud, deporte, cultura y discapacidad; seguridad, donde se discutieron los crímenes, el narcotráfico y las cárceles; economía, en el que se expuso sobre producción e inserción internacional; conocimiento, que incluyó educación y innovación y, por último, trabajo, que abarcó lo vinculado al empleo, el salario y la seguridad social.
El evento permitió a cada candidato exponer sus ideas y propuestas en turnos cronometrados que incluían exposiciones iniciales de tres minutos, réplicas de dos minutos y contraréplicas de un minuto. Cada candidato estuvo acompañado por seis asesores:
Orsi fue acompañado por Alejandro Sánchez, senador y jefe de campaña; Carolina Cosse, candidata a vicepresidenta; Cristina Lustemberg, senadora electa; Gabriel Oddone, eventual ministro de Economía en caso de que gane el Frente Amplio; Camilo Cejas, asesor del candidato; y Liliam Kechichian, senadora. En el caso de Delgado fueron Nicolás Martínez, jefe de campaña; Valeria Ripoll, candidata a vicepresidenta; Diego Labat, eventual ministro de Economía si gana Delgado; Agustín Iturralde, coordinador de los equipos técnicos y los asesores Horacio Abadie y Diego Silva.
Al comienzo del debate ambos candidatos dieron un primer mensaje. Orsi comenzó diciendo: “Soy Yamandú Orsi, me crié en un barrio en una ciudad del interior. Fui a la escuela pública, al liceo. Me recibí de docente, y en los últimos años tuve la responsabilidad de gobernar Canelones en dos períodos consecutivos”. Aseguró que este domingo 24 de noviembre se debe elegir entre dos opciones: “un país estancado o un cambio seguro que no será radical”. “Un cambio que implica que los salarios suban, que las jubilaciones rindan. Un cambio en el que todos podamos transitar tranquilos por nuestras calles”, dijo.
En el caso de Delgado, al comienzo de su presentación aseguró que el debate es “como una entrevista de trabajo” en la que la gente es quien decide a quién va a contratar como presidente de la República. Destacó que en esta decisión el currículum y la experiencia juegan un rol importante: “Ustedes me vieron todos estos años trabajando en la Presidencia de la República junto a Lacalle Pou, momentos difíciles dando la cara, haciendo crecer la economía, el empleo y el salario”. También apeló a “dos modelos de país” pero en este caso habló de uno que “retrocede en ideología” y otro que “ofrece garantías, futuro y desarrollo”.
Contraste en las propuestas
De acuerdo con el sorteo realizado por la Corte Electoral, el primer eje temático a tratar fue el de desarrollo humano y quien hizo uso de la palabra en primer lugar fue Orsi. El candidato por el FA comenzó por la salud, planteó que la prioridad es acortar los tiempos de espera a la hora de recibir atención médica y fortalecer el acceso a medicamentos. Para ello presentó cinco propuestas, por un lado mejorar el sistema integrado de salud que fue creado por el FA en 2007 y por otro lado brindarle un papel más fuerte al ministerio de salud pública para que la supervisión sea eficaz. En tercer lugar, planteó aplicar la ley de salud mental ya que aseguró que “todos sabemos bien el problema que estamos teniendo”. En el cuarto punto propuso radicar a más médicos en el interior del país y por último mejorar la gestión de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE). El candidato por el FA cuestionó: “¿Por qué en este gobierno se dejó caer Casa de Galicia?”.
Sobre vivienda Orsi planteó que el acceso a esta sigue siendo inalcanzable para mucha gente y por eso propuso el plan “Primera Vivienda” y el de “vivienda social”, el primero daría acceso a crédito con subsidio al capital y a la cuota para poder acceder por primera vez y el segundo propone “generar un stock de vivienda, que lo tiene que hacer el Estado, para que la gente pueda acceder a un alquiler accesible”. En esta ocasión también cuestionó a Delgado y le lanzó: “¿Dónde están las 50.000 viviendas que se prometieron?”.
Por su parte, cuando Delgado inició su oratoria coincidió con que el enfoque debe ser mejorar la calidad de vida de los uruguayos. Luego criticó los resultados de los 15 años de gobiernos frenteamplistas en materia de asentamientos y aseguró que el FA entregó el gobierno con 218.000 uruguayos viviendo en este tipo de viviendas precarias. Destacó que el gobierno actual implementó el “Plan Avanzar” para darle acceso a una vivienda digna a 60.000 uruguayos y sentenció con que “el Frente Amplio no votó el plan Avanzar para viviendas dignas”. Mencionó la creación de infraestructuras como el Hospital del Cerro y los 12 centros de atención a la niñez. En cuanto a discapacidad, propuso crear una Secretaría de Discapacidad en Presidencia.
Seguridad bajo la lupa
El siguiente eje temático fue el de la seguridad. En este caso, el debate lo abrió Delgado. El candidato del PN inició el bloque con críticas a la herencia del FA: “El 2019 fue el año más violento del Uruguay”, afirmó. Destacó que el gobierno actual, del cual forma parte, logró una reducción de las denuncias de delitos. Atribuyó esta baja a la confianza que le entregaron a la policía gracias a la implementación de la Ley de Urgente Consideración (LUC) que les dio respaldo jurídico. Propuso el uso de tecnología avanzada y un grupo anti mafia para combatir el crimen organizado. El candidato planteó la posibilidad de fusionar represión con rehabilitación y aseguró que trabajarán “con represión por un lado, pero también rehabilitación y reinserción”. Delgado apuntó contra el FA por el posible equipo encargado de la seguridad: “Nosotros tenemos un equipo creíble, el FA quiere poner al frente al equipo de Bonomi”.
Por su parte, el candidato del FA pidió “no banalizar la discusión” y agregó que esta semana se superaron las 350 víctimas anuales de la violencia fatal. Enfatizó en la necesidad de “reprimir el delito, defender a las víctimas y respaldar a la policía dándoles aumentos de salarios y soluciones de vivienda”. Prometió intensificar el patrullaje, agregar 2.000 efectivos más a las calles y llegar a 20.000 cámaras de video vigilancia. En cuanto a las fronteras, planteó que se deben reforzar todas las vías para que “no sea más un colador”. Orsi cuestionó: “¿Por qué han pasado 43 jefes de policías por nuestras jefaturas? ¿Por qué si mientras avanza el narcotráfico, las cifras de lavado son cada vez menos?”.
Economía en debate
En este bloque, ambos precandidatos se comprometieron a no subir impuestos, pero también intercambiaron acusaciones. Orsi, quién inició este eje temático, garantizó que brindará apoyo a las pequeñas y medianas empresas, beneficiándolas en el costo de la energía. El candidato por el FA aseguró que Uruguay es un país “caro” y cuestionó cómo se explica el atraso cambiario que ha generado tantas pérdidas: “yo le pregunto a los ciudadanos si esta bonanza económica ustedes la sienten en el bolsillo”. Orsi resaltó que el crecimiento económico debe volver al campo y a la actividad agropecuaria y para ello se comprometió a fortalecer con 25.000 hectáreas al Instituto Nacional de Colonización.
Delgado aseguró que, pese a que el actual gobierno debió sobrellevar cinco crisis, lograron que “la economía siguiera funcionando”. Planteó que urge bajar el costo de vida y que uno de sus propósitos es lograr “un Uruguay más barato para vivir y producir”. Además, señaló que “el Frente Amplio va a subir los impuestos porque lo dice su programa”. Agregó que planea generar estímulos a la inversión y lograr abrir un Uruguay al mundo “con pragmatismo y sin ideología”.
Túnica blanca y moña azul
Educación e innovación fue el cuarto eje temático. Al comienzo del debate Delgado recordó la frase “educación, educación, educación” del ex presidente José Mujica pero criticó que luego “no pudo con los sindicatos de la educación”. Utilizó este ejemplo para remarcar que el gobierno actual está dando soluciones ya que luego de la pandemia implementaron la transformación educativa. Delgado criticó el derecho a la huelga hecho por los docentes y aseguró que eran “paros políticos”. Por otro lado, criticó la propuesta del FA de un congreso de educación vinculante ya que considera que el Poder Ejecutivo debe tomar decisiones y no generar un “estado de asamblea permanente”.
Orsi, por su parte, indicó que no va a plantear grandes reformas. Aseguró que va a apoyar a los alumnos con 2.500 pesos al inicio de las clases, multiplicar por cinco las becas en educación secundaria y duplicar la cobertura de tiempo pedagógico extendido. Por otro lado, propuso universalizar la educación inicial y recuperar la inversión en la Administración Nacional de Educación Pública y en la Universidad de la República.
Más puestos
Orsi fue quien dio inicio al último eje temático, el de trabajo. El candidato propuso la creación de 12.000 empleos anuales para jóvenes de 18 a 24 años ya que afirmó que la desocupación juvenil en Uruguay es la más alta de la región. Resaltó la importancia de reforzar el Sistema Nacional Integrado de Cuidados (SNIC) para garantizar que las madres jefas de hogar que “tienen la disyuntiva de criar a sus hijos o ir a trabajar” puedan ingresar al mercado laboral. Recordó que en el año 2015 el presidente Tabaré Vazquez creó el SNIC y aseguró que esa herramienta hace que esto sea posible. Por otro lado, planteó dos aumentos anuales para las jubilaciones mínimas. Orsi aseguró: “que quede claro, no vamos a derogar las AFAP”. Sin embargo, indicó que si se va a “revisar” el funcionamiento del sistema.
Delgado, por su parte, afirmó que durante el gobierno del FA fueron 50.000 los puestos de trabajo que se perdieron y que el actual gobierno generó casi 100.000 cotizantes más al Banco de Previsión Social. Dijo que la LUC “permitió oportunidades, libertades y derechos” y destacó que durante las huelgas el trabajador que se encontraba en desacuerdo con la medida tuvo la posibilidad de seguir trabajando. El candidato propuso un “suplemento solidario” de entre 4.000 y 8.000 pesos para 140.000 jubilados que no alcanzan la jubilación mínima. A su vez, prometió dar incentivos fiscales y exoneraciones para alcanzar la contratación de 30.000 jóvenes que buscan su primer empleo.
Declaraciones
Una vez finalizado el debate, la primera en retirarse fue la candidata a la vicepresidencia por el Frente Amplio, Carolina Cosse, que se retiró del estudio directo al auto y respondió breves preguntas por parte de la prensa. Cosse apuntó al candidato blanco: “Yo creo que Delgado nos tiene que agradecer al Frente Amplio por tener un programa, porque si no lo tuviéramos, Delgado no hubiera tenido debate”. Minutos más tarde, se retiró el candidato por el FA, Yamandú Orsi y si bien agradeció a la prensa por estar presente, no quiso dar declaraciones.
Previo a la salida de Alvaro Delgado, la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, al ser consultada sobre las sensaciones que le dejó el debate destacó la postura de Delgado como un “hombre de Estado” y a Orsi desde una “postura de lectura de discurso y destacando su condición de intendente”.
Minutos más tarde, Delgado se retiró acompañado de distintas autoridades del PN y la Coalición Republicana. Al principio no quiso dar declaraciones, sin embargo una vez fuera del estudio bajó del vehículo, habló con la prensa y destacó que le hubiera gustado más instancias para debatir. Siguió su camino hasta la esquina de Yatay y Marcelino Sosa, donde un grupo de militantes esperaban al candidato para saludarlo, estuvo unos minutos en la intersección y luego se retiró con parte de su equipo.
Daphne Martiarena, Ignacio Machado y Micaela Bidegaint.