La Agencia del Cine y el Audiovisual del Uruguay (ACAU) presentó un informe con los resultados de la primera Encuesta Nacional del Sector Audiovisual. En este trabajo se abordó la situación general que atraviesa la industria uruguaya y se hizo énfasis en conocer la población que trabaja en el medio, su inserción laboral y los rangos etarios. Por otro lado, se conoció el grado de formación que poseen los profesionales y sus salarios anuales. También se integró a una gran cantidad de trabajadores que forman parte de emprendimientos personales o ejercen como freelancers.
Los primeros resultados demostraron las características demográficas y se pudo encontrar una gran brecha respecto a la diferencia de género. Mientras que el 60% de los trabajadores que realizaron la encuesta son de género masculino, poco más de 30% abarca al femenino. El director de cine uruguayo Guillermo Rocamora dijo a Sala de Redacción (SdR) que este es el aspecto que más le llamó la atención y que sin dudas es “algo que realmente tiene que trabajar y mejorar el sector”.
Con respecto a la distribución laboral a lo largo del país, los datos arrojan que el mercado presenta una centralización muy marcada en Montevideo. El 70% de los participantes de la encuesta ejerce en la capital del país, mientras que la mayor representación del interior está en Maldonado (3,2%) y Canelones (2,6%). Rocamora, quien participó en grabaciones por México, Ecuador y Argentina, reconoce que en la mayoría de los países del mundo el cine es desarrollado principalmente en una sola ciudad. Su experiencia internacional le permitió comprender que “no es una industria con una expansión fácil de implementar en todos los lugares” y por lo tanto, asegura que Montevideo seguirá siendo el punto principal de los medios audiovisuales.
En lo que se relaciona con el ámbito laboral, se determinó que más de la mitad de los encuestados (56%) trabaja como freelance. Esto, reconoce el informe, expone una fragilidad laboral importante ya que estos empleos suelen ser inestables y generalmente son temporales. De esto se desprende otro dato significativo y es que únicamente el 38% tiene trabajo los 12 meses del año; pero lo que más preocupa es que el 11% consigue trabajar solo menos de un mes al año y un 30% menos de seis meses. Sin embargo, el guionista y director interpretó un importante ascenso en la cantidad de gente que está en actividad y puede vivir del mundo audiovisual. También hizo la comparación con sus inicios y señaló que anteriormente eran muy pocos los privilegiados que tenían la posibilidad de poder insertarse en el medio.
Desde el plano académico la realidad es otra: en la actualidad 46% de los participantes logró completar un grado universitario y 15% realizó doctorados o maestrías. Para Rocamora la formación uruguaya ha tenido un crecimiento en el marco global, tanto en enseñanza pública como privada y actualmente “las instituciones educativas se han interesado en tener técnicos dando clases y eso es clave porque están en actividad y son docentes al mismo tiempo”. Consideró que este contacto entre profesionales y estudiantes es necesario para el desarrollo de toda el área en general y sobre todo el de los futuros trabajadores.
Pese al avance pedagógico, ACAU encontró un desfase pronunciado entre la relación de formación y remuneración. Aunque creció la calidad de la educación, la encuesta marcó que más de la mitad de los encuestados gana menos de 300.000 pesos al año y, para el 70% de ellos, es su principal fuente de ingresos. El problema monetario no afecta solamente a los trabajadores sino a la industria en general. Rocamora considera necesario “romper con el tope económico actual”, ya que muchas veces la calidad del producto se ve disminuida porque se agotan los 12 millones de dólares que destina el Estado para los medios audiovisuales.
En línea con ello y relacionado al aspecto económico, SdR habló con la secretaria general de la Asociación de Productores y Realizadores de Cine del Uruguay Clara Charlo, quien mostró su preocupación por el bajo salario que perciben los trabajadores. A su vez, en términos de infraestructura fundamentó que para alcanzar una mejor “profesionalización” se necesita invertir en las micro empresas, principalmente las casas productoras, que son quienes llevan a cabo los proyectos.
Por otra parte, reconoció que la encuesta es un punto de partida para direccionar el futuro y conocer aspectos que nunca habían sido tratados. Sin embargo, interpretó que no abarca firmemente a todos los componentes del sector. La secretaria general señaló que “se necesita profundizar mucho más”, ya que hubo gente que no participó de la encuesta. Argumentó que de cara a próximas investigaciones y para obtener nuevos indicadores, es necesario “conocer el estado de los técnicos, casas productoras y proveedores de servicio”.
SdR se comunicó con representantes de ACAU, para conocer una opinión más profunda sobre los resultados de la encuesta y posibles políticas o decisiones al respecto a futuro, pero desde la organización prefirieron no dar declaraciones.
En esta encuesta el objetivo pasó por identificar las tendencias, problemáticas y necesidades que atraviesa el sector. Fue de carácter opcional y decidieron participar 984 personas, lo cual representa el 24.6% del total de 4000 personas que se encuentran inscriptas en el Registro Público del Sector Cinematográfico y Audiovisual. Se realizó entre el 18 de abril y el 17 de junio y fue por formato digital.